Un grupo de unas quince mujeres, además de un equipo asesor, ha constituido en Elche la Cooperativa Valenciana de Empleadas de Hogar del Levante, como así se denomina la primera sociedad cooperativa que surge en la ciudad y, probablemente, en la provincia. La cooperativa nace a raíz de la normativa que a partir del 1 de julio exigirá que cualquier persona que tenga este servicio doméstico, incluso si es durante unas horas al mes, tenga que realizar un contrato de trabajo a la empleada de hogar, según explicaba ayer el asesor José Pomares, quien ha llevado las gestiones jurídicas y administrativas para la creación de la cooperativa. "La nueva ley presenta muchos problemas, sobre todo para las personas mayores que requieren del servicio de una empleada de hogar. Aunque sean dos horas al mes, la ley les exige que les hagan un contrato, les den de alta en la Seguridad Social, cubran bajas por enfermedad, etc. Esta persona debe convertirse en un empresario y para ellos es algo que les desborda", comenta José Pomares.
El fin de la cooperativa es solucionar, precisamente, estas situaciones, dando cobertura legal al servicio, pero evitando que el cliente tenga que convertirse en empleador. "El servicio lo ofrece la cooperativa y se paga por ello sin más problemas. La cooperativa es la que se encarga de todo, ya que es una empresa de trabajadoras. La persona que necesite a una empleada de hogar podrá pedirlo a la cooperativa y despreocuparse de estas exigencias legales. Además, si el cliente realiza la contratación la empleada de hogar, con la nueva norma, no cotiza para el desempleo. El servicio, prestado a través de la cooperativa, sí que incluye esta cotización", indicó Pomares.
La cooperativa celebrará a las siete de esta tarde una reunión en MAZ Ilicitana para elegir junta directiva, estando abierta a la incorporación de todas las mujeres que estén interesadas. En el teléfono 96- 621 14 43 se puede obtener más información.
