Alumnos de un ciclo de Informática del instituto Severo Ochoa pueden decir abiertamente que han visto el espacio. Y es que, lo que para organismos como la NASA o lugares como el aeropuerto puede ser una tarea habitual, para este centro educativo ha supuesto todo un logro.

A través de una subvención europea, gestionada por el profesor de informática, Javier Martín, un grupo de ocho estudiantes han fabricado de forma casera una sonda con una cámara integrada para captar imágenes de la curvatura de la Tierra.

Según Celso Luján, profesor del departamento de Filosofía que ha colaborado en el proyecto, el mecanismo incorporaba un innovador sistema informático creado para mandar señales e imágenes en directo de la posición de la sonda. Así, dentro de un globo meteorológico relleno de helio, el artefacto ha conseguido alcanzar 32 kilómetros sobre el nivel del mar.

"Nos fuimos a Cuenca para lanzar la sonda al espacio para aprovechar la corriente de aire del mediterráneo y el aparato despegó con un paracaídas integrado tras recorrer 80 kilómetros", comenta Luján.

Con ello, este mecanismo pudo ascender hasta una de las capas más importantes de la atmósfera, conocida como estratosfera y que se encuentra en la parte inferior de la capa de ozono donde se absorben la mayoría de los rayos ultravioletas procedentes del sol.

De esta forma, los alumnos consiguieron hacer un seguimiento segundo por segundo de la posición de su sonda "casera" a través de una página web creada para la ocasión y de dispositivos móviles.

"Lo más valioso de este proyecto es el sistema informático que han diseñado los alumnos, porque muchos lanzan globos meteorológicos y no se sabe donde van ni hasta donde llegan", apunta el profesor del instituto Severo Ochoa.

En este sentido, la experiencia también ha servido para ilustrar las clases de Filosofía de segundo de Bachillerato del centro educativo ilicitano, ya que según Celso Luján, Homero, autor de grandes obras de La Ilíada y La Odisea hizo a lo largo de su vida numerosas alusiones al universo.

"Esta iniciativa ha sido todo un éxito tanto en investigación como en didáctica de la astrofísica y la informática, las imágenes de la curvatura de la Tierra son espectaculares, y los alumnos están muy motivados y con muchas ganas de embarcarse en nuevos proyectos", apunta Celso Luján.