El Hospital General de Elche cuenta desde hace diez meses con una unidad para atender los accidentes cerebrovasculares que en sus primeros seis meses activó 68 códigos ictus, una patología que se presenta de "golpe" por la obstrucción de una arteria (ictus isquémico) o por la rotura de un vaso que provoca un derrame (ictus hemorrágico). "Sabemos que los tratamientos trombolíticos aplicados en las primeras cuatro horas y media pueden, de forma total o parcial, romper el trombo en el caso de un ictus isquémico y permeabilizar la arteria, de modo que de lo que podía ser fatal puede mejorar de forma significativa siempre que se llegue a tiempo", explicó el jefe del servicio de Neurología, Jordi Alom, quien hizo hincapié de modo reiterado en la importancia de que los pacientes reconozcan los síntomas y den aviso a la mayor brevedad al 112, ya que serán los servicios de emergencias los que determinen a qué centro hay que llevar al enfermo para que sea atendido a la mayor brevedad. "En este caso, hay que tener muy presente que el tiempo es cerebro".

Por ello, los especialistas remarcan la importancia de estar alerta si "de repente" se detecta una paralización de un lado del cuerpo, trastornos en las funciones cognitivas, dificultades en el habla o en la pronunciación o alteraciones en la visión. "En esos casos hay que acudir al centro correspondiente. Si ello es de golpe es porque el flujo se ha cortado", indicó Alom, quien recordó que "lo malo de esta enfermedad es que del total de ictus que ingresan en el hospital, el 40% llega fuera de tiempo".

El centro ilicitano dispone desde mediados de 2011 de una unidad de ictus habilitada gracias al plan de atención de esta enfermedad diseñado por la Generalitat y que permite que el hospital pueda aplicar el código ictus las 24 horas del día los 365 días del año para los pacientes adscritos al propio centro y a los del Vinalopó, Torrevieja, Orihuela y Elda. Para ello se dispone de un neurólogo de guardia localizada "y con la máxima eficacia y eficiencia de unos recursos mínimos hemos organizado una pequeña unidad para aplicar los tratamientos. El objetivo sería tener un neurólogo de guardia física y un mayor dispositivo de enfermería", explicó Alom.