El brote de sarampión que se está propagando en la provincia de Alicante se debe, según los especialistas, a una deficiente vacunación. Por ello, el objetivo es lograr que la administración de los procesos preventivos sea lo más alta posible para evitar graves consecuencias.
¿A qué obedece el brote de sarampión?
A que la gente no se vacuna. De tener una cobertura casi perfecta hemos tasado a una tasa bastante deficiente por los movimientos sociales contra las vacunas, por la dejadez de las familias y por la falta de interés de los facultativos de Atención Primaria que en muchos casos no son pediatras y que no están tan concienciados en este tema como nosotros. Hay que hacer un esfuerzo suplementario para convencer a la población con niveles sociales bajos, hay que estar encima de ellos y eso es labor del médico.
¿Reviste riesgos la vacuna?
Todas las vacunas pueden tener efectos secundarios, pero hasta lo que sabemos a día de hoy, estos son menores que los que puede provocar la enfermedad natural. La vacuna del sarampión puede provocar efectos secundarios graves en un caso de cada millón y la enfermedad lo provoca en un caso de cada mil. La proporción entre uno y otro riesgo está claro.
¿Qué complicaciones puede presentar la enfermedad?
Suele presentar una afectación importante del estado general y, lo más importante, presenta riesgo de complicaciones pulmonares. Puede haber alteraciones hematológicas, cerebrales y otológicas. Los riesgos más importantes son la neumonía por sarampión y las encefalitis. A finales de los 80 sufrimos una epidemia en la que hubo más de 400 casos e incluso recuerdo que falleció algún niño.
¿Cuándo es recomendable la hospitalización?
Lo mejor es que el niño sea tratado en casa, porque así además se reducen los riegos de contagio. Sólo ingresamos los casos con factores de riesgo, cuando sospechamos que puede haber sobreinfecciones.
¿Porqué no se actúa desde la administración para aumentar las tasas de vacunación?
En el tema de las vacunas hay tres problemas fundamentales: que cada comunidad autónoma tiene un calendario vacunal distinto, que la gente se ha relajado y ha descendido la cobertura y que la crisis económica ha paralizado la adquisición de dosis que no facilita la sanidad pública.
¿Por qué no se ha conseguido erradicar el virus?
Porque es muy complicado conseguir una tasa de vacunación adecuada en los países en vía de desarrollo y el virus se propaga con mucha facilidad en una sociedad que viaja con frecuencia. En cualquier caso, si la cobertura vacunacional en Occidente hubiera sido la correcta no estaríamos hablando de esto. La situación actual lo que nos demuestra es que en el tema de las vacunas no se puede bajar la guardia.
