El Ayuntamiento de Elche ha aprobado una modificación de los criterios para acceder a las ayudas para el apuntalamiento de viviendas en San Antón, de forma que las 170 familias que se habían quedado fuera con los criterios que estableció el anterior equipo de gobierno puedan obtener las subvenciones, según anunció ayer el concejal de Barrios, Daniel Rubio. En total, según precisó el edil, de 350 viviendas, 170 se quedaron sin las ayudas, que oscilan entre los 1.500 y los 2.000 euros. El primer paso ahora, como anunció, será revisar todos esos expedientes.
Daniel Rubio indicó que, "cuando se firmó el convenio de la renovación urbana de San Antón, el Ayuntamiento asumió el mantenimiento y el apuntalamiento de los bloques, conjuntamente con el derribo de los edificios". Sin embargo, denunció que "la anterior Corporación, en la Junta de Gobierno Local del 20 de mayo, denegó el recurso de 70 propietarios y, por tanto, la subvención para el apuntalamiento, lo que se suma a otros 40 casos en los que hemos tenido que paralizar el proceso en vía ejecutiva porque se iba a embargar a los propietarios, y otros expedientes pendientes hasta llegar a los 170 propietarios, cuando el compromiso del anterior equipo de gobierno era que todos los residentes iban a obtener esa subvención cuando las circunstancias económicas lo requirieran".
Así las cosas, el concejal de Barrios concretó que "lo que se ha aprobado en la Junta de Gobierno Local es una adaptación a la resolución de la Generalitat Valenciana para obtener subvenciones en materia de renovación urbana, ya que las condiciones que pedía el anterior equipo de gobierno eran más restrictivas". En este sentido, el responsable municipal de Barrios especificó que "a la mayoría de vecinos se les denegó la solicitud por tener un inmueble", y añadió que "cualquier ciudadano que tuviera un saladar con 600 euros de valor catastral no tenía derecho a subvención". El edil comentó que, tras la adaptación aprobada por la Junta de Gobierno Local, "vamos a hacer una revisión de todos esos expedientes y vamos a ver qué personas tienen derecho a esas subvenciones, aunque estamos seguros de que van a ser muchas".
En cuanto a los trabajos para reforzar las estructuras de los inmuebles, señaló que, "de manera urgente, vamos a actuar en algún bloque del barrio, como en el número 6, porque es necesario, y también se va a licitar de manera inminente, en los próximos meses, el apuntalamiento del resto de bloques". El concejal incidió en que "la labor de mantenimiento de los edificios es algo que se tendría que haber hecho ya y, por eso, lo vamos a hacer de forma inminente, porque lo primero es la seguridad de las personas".
Finalmente, el concejal afirmó que el Ayuntamiento va a ceder al Instituto Valenciano de Vivienda (Ivvsa) un local frente a la ermita de San Antón, en el mismo inmueble que ahora ocupa Espais Verds, para que se pueda trasladar hasta allí la oficina de información a los vecinos que el ente autonómico tenía hasta ahora en la zona nueva del barrio. Daniel Rubio indicó que "la intención de la Generalitat, por la situación económica, era trasladar este punto a un local propio", y detalló que el emplazamiento que se barajaba era la oficina del Prop.
Licitación de los bloques para principios de año
El concejal de Barrios, Daniel Rubio, aseguró ayer, tras una reunión que mantuvo con los residentes de la zona, que las obras de reurbanización de San Antón "van a buen ritmo", y puso el acento en que, "una vez que esté a punto de finalizar la urbanización, se licitarán las obras de edificación de la primera fase de bloques". El edil recordó que el plazo de ejecución de la reurbanización era de diez meses, por lo que comentó que para principios del próximo año se podría licitar el proyecto. Además, insistió en que "tenemos un contacto permanente con los vecinos del barrio".
