Investigadores de la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, del Monasterio del Puig de Valencia y del Instituto Histórico de Salamanca han visitado el Archivo Municipal para digitalizar unos valiosos fondos que han sido descubiertos por la responsable del mismo y que permitirán completar la historia de la Orden de la Merced. "Los documentos han sido encontrados durante el proceso de reconstrucción de la colección de Pedro Ibarra, en la que hallamos unos legajos que se habían sacado de Elche con la desamortización del convento de la Merced y que el historiador ilicitano compró en Valencia por cuatro pesetas", explica Carmina Verdú, la jefa del Archivo Municipal.

Los quince volúmenes, que componen un fondo manuscrito e impreso, perteneció al padre Agustín Arqués Jover, (natural de Cocentaina y conventual de Elche) quien fue archivero general de la orden de la Merced en Madrid entre 1782 y 1793 y que se encargó de recoger toda esta documentación "que yo creía que excedía de lo que estaba circunscrito a Elche y que podría permitir reconstruir el archivo de la orden que había quedado desmembrado", explicó Verdú, quien comunicó el hallazgo a los investigadores de Roma.

Por eso, durante esta semana ha estado examinando los fondos Stefano Defraia, profesor de la Facultad de Historia de la Universidad Pontificia de Roma, acompañado por el padre Enrique Mora -secretario del Instituto Histórico de Salamanca- y por Manuel Anglés -archivero del Monasterio del Puig de Valencia-. ""Había que ver los fondos y comprobar su importancia, aunque ya sabemos que Arqués recuperó la mayor parte de la documentación que la orden ha perdido. Estos textos que se conservan en Elche recuperan el archivo de la orden desde 1574. Estos papeles sirven para valorar el patrimonio histórico y espiritual de la orden, un trozo de nuestra identidad y de manera especial la de Elche y la de Valencia".

A partir de aquí se va a proceder a digitalizar los fondos "para poder hacer un proyecto y darlo a conocer y que los investigadores profesionales comiencen a trabajar en reconstruir esta parte de nuestro patrimonio, algo que en estos momentos tiene especial relevancia porque en 2018 se cumple el octavo centenario de la orden y se están realizando importantes inversiones en el inventariado y recopilación del patrimonio histórico-artístico de la orden", señaló el profesor Defraia, quien remarcó que éste es el momento de "pasar del almacén al archivo para valorar la memoria histórica de la orden".

A pesar de que aún no se conoce con exactitud qué "tesoros" guardan los documentos recopilados por Arqués, "suponemos que habrá de todo sobre la orden. El patrimonio tras el proceso de desamortización se dividió y por casualidad está repartido entre la Biblioteca Nacional (que es una mina de la historia social y de la espiritualidad), en el Archivo Histórico Nacional y en la Real Academia de la Historia, y ahora encontramos aquí estos valiosos documentos que nos van a permitir recuperar todo lo que se desmembró en España, en Europa y en América", manifestó Defraia, quien remarcó que se va a proceder a la digitalización de los fondos "sin ayuda de nadie".

A partir de ahora se van a preparar publicaciones, trabajos y críticas "para dar a conocer al mundo científico este patrimonio y empezar a valorar los distintos aportes de los manuscritos de estas fuentes", explicaron los investigadores que ayer dieron por concluida su primera visita al Archivo Municipal de Elche.

El profesor Stefano Defraia tiene ya previsto realizar una nueva visita a Elche en febrero para realizar un "análisis codicológico" y poder disponer de una información científica más puntual.