El Consell ha aprobado la resolución de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda que declara la emergencia de las obras de instalación de un desagüe de fondo en el embalse de Poniente, en el Parque Natural de El Hondo, en Elche, según informaron ayer fuentes de la Generalitat Valenciana.

Estas obras, que contarán con una inversión de 220.000 euros, prevén dotar al embalse de Poniente de un desagüe de fondo que posibilite su vaciado cuando, como ocurre en la actualidad, la calidad del agua embalsada sea inadmisible o potencialmente tóxica para el ecosistema, es decir, con una salinidad muy elevada.

Si en estas condiciones de salinidad y conductividad se procediera al llenado del embalse en otoño, tanto por condiciones hidrológicas como por las restricciones para la protección de la malvasía, el agua embalsada quedaría contaminada por la mezcla con la existente, lo que la convertiría en inservible para los fines medioambientales, así como para riego.

Por este motivo, la Conselleria de Medio Ambiente y Agua realizará las obras de instalación del desagüe de fondo con la máxima urgencia y con un plazo de ejecución de 4 meses, de forma que esté operativa en septiembre y poder efectuar, así, el llenado del embalse con el agua procedente de las lluvias otoñales, mediante las que se realizará el lavado y vaciado que impida que las aguas siguientes se embalsen con las mínimas condiciones de calidad.

Los técnicos de la Generalitat deben excavar por tanto un agujero, en concreto en el embalse de Poniente, para que éste trabaje a modo de desagüe, y se filtre agua y tierras afectadas por el alto grado de salinidad desde el pasado verano.

Cabe resaltar que tanto este embalse como el de Levante están, según indicaron día atrás responsables de Riegos de Levante, prácticamente secos, inservibles para la función de riego de los campos agrícolas, y con una baja calidad de la lámina de agua actual.

Gran riqueza biológica

El Parque Natural de El Hondo de Elche es el humedal de agua dulce más extenso e importante de sureste español. Se trata de un humedal artificial, un embalse de gran extensión y escasa profundidad creado a principios del siglo XX para aprovechar los sobrantes de agua del río Segura y de los azarbes de la Vega Baja en su desembocadura.

Sin embargo, toda la zona sufre una carencia crónica de recursos hídricos y más concretamente la cuenca del río Segura a la que pertenece, que está ampliamente sobreexplotada.

Por ello, la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda y la Comunidad General de Regantes Riegos de Levante, Margen Izquierda del Segura, tienen suscrito un convenio con el objetivo de compatibilizar la gestión de los embalses para uso agrario con las necesidades ambientales del humedal, que fue declarado en 1994 por la Generalitat Valenciana parque natural por su gran riqueza biológica.

El parque abarca 2.387 hectáreas y comprende dos embalses reguladores de riego, charcas perimetrales y zonas de saladar y cultivos. Es la fauna el aspecto más valioso del parque, tanto por la gran abundancia como por la presencia de especies seriamente amenazadas de extinción.