Vivir en la ciudad y en un piso de unos 90 metros cuadrados ya no es excusa para no poder cultivar todo tipo de verduras y hortalizas y tener, como la gente del campo, la huerta en casa. Esto se debe a los llamados balcones comestibles, una costumbre que cada vez toma más fuerza y podemos encontrar en varios puntos de la ciudad de Elche.

Concretamente, en un pequeño balcón en la nueva zona de Altabix de Elche. En un pequeña superficie de su balcón, la vecina Carolina Alcaraz ha sido capaz de cultivar tomates, pepinos, girasoles, rábanos, lechugas, cebollas, guisantes, col lombarda y perejil, entre otras muchas plantas.

Carolina Alcaraz, que es ingeniera agrónoma, explicó que "por motivos de trabajo me puse al día, y al final recogí semillas y empecé a plantar". Esta vecina de Altabix asegura que "es muy fácil cultivar en casa, aunque yo juego con la ventaja de que mi pequeño balcón está bien protegido y tiene orientación sureste". Alcaraz indicó que "conocía a gente que tenía plantadas cosas y empecé por curiosidad, fue como un experimento que ha dado buenos resultados". Carolina Alcaraz aseguró que "es una cosa que te hace ilusión, y ya estoy pensando en qué más cosas puedo plantar".

No obstante, para que las plantaciones en los balcones den buenos frutos hay que tener en cuenta algunas nociones teóricas y básicas de la agricultura ecológica. Saber cuál es el tipo de recipiente adecuado para cada cultivo es fundamental, al igual que la tierra o la profundidad que necesita cada planta para que pueda dar resultado, pese a estar en un balcón dentro de la ciudad.

Carolina Alcaraz explicó que "mi primera intención era tener plantas verdes, pero no las típicas macetas por lo que empecé a investigar qué podía plantar y al final he terminado cultivando mis propias verduras en casa".

La moda de cultivar en los balcones viene de la mano de los huertos urbanos. Sobre éstos dos temas, la Asociación de Vecinos Barrio Obrero de Altabix ha impartido un curso para promover la creación de huertas caseras y capacitar a los interesados para que las mantengan. Además, fomentan la sensibilización hacia la problemática ambiental actual derivada de los sistemas de producción, distribución y venta de los productos de la agricultura industrial.

Buenos resultados en escasos metros

Pese a disponer de un balcón con poco metros, la vecina Carolina Alcaraz ha sido capaz de cultivar numerosas verduras y hortalizas en su piso, situado en el barrio de Altabix. Esta misma semana, Carolina recolectó su cosecha de rábanos, de primera calidad, que han crecido en un macetero apropiado que comparten con otras plantas.

Y es que para aprovechar el espacio al máximo, Carolina ha conseguido cultivar productos distintos en un mismo recipiente y a la vez. "Hago asociaciones de cultivo, para ver cuáles pueden compartir macetero", explica Carolina Alcaraz, que anima a cultivar productos en casa.