La Federación Provincial de Comunidades de Regantes y la Junta Central de Usuarios del Júcar-Vinalopó han decido prescindir de PSOE y PP en su nueva cruzada para lograr que el agua el Júcar que llegue a Alicante a través del trasvase tenga calidad suficiente para el riego y el consumo urbano, y volcarán a partir de ahora todos los esfuerzos en movilizar a la sociedad civil de la provincia. El cambio de estrategia se produce tras conocerse que el Gobierno ha dejado sin consignación económica la construcción de una planta para potabilizar el agua del Júcar-Vinalopó.
El objetivo, según apuntó ayer Ángel Urbina, portavoz de la federación, es conseguir una movilización ciudadana similar a la que logró frenar el cierre del Tajo-Segura "pero esta vez pelearemos porque el Júcar-Vinalopó acabe bien". Urbina recordó que "han pasado catorce meses desde que se nos prometió la potabilizadora como mal menor y acabamos de conocer que el Ministerio de Medio Ambiente no la tiene en sus presupuestos para 2011. No podemos seguir así y si tenemos que volver a salir a la calle lo haremos", anunció Urbina quien, por otro lado, aseveró que "quizá lo único bueno al ver que no hay un euro para la potabilizadora es que estamos un poco más cerca de conseguir una segunda toma en Antella o, por qué no, recuperar la de Cortes de Pallás", reiteró Urbina.
Los usuarios del Júcar-Vinalopó insisten en que "la calidad del agua del azud de la Marquesa no es buena. No sirve para beber y mienten los usuarios tradicionales del Júcar cuando afiman que los arrozales de Cullera, Favareta o Sueca se riegan con ese agua. Es mentira, sólo utilizan un caudal testimonial y lo que quieren bombear a la provincia son retornos del regadío por inundación de los arrozales", subrayó.
La Federación y la Junta Central de Usuarios del Júcar-Vinalopó van a tratar de concienciar a la patronal -Coepa, Ineca y Cámara de Comercio-; las dos universidades (Alicante y Miguel Hernández) y a los sindicatos. "Está claro que tanto el PSOE como el PP están más pendientes de solucionar sus batallas internas que en trabajar por el agua siempre que no sea por beneficios electorales, por lo que somos los afectados los que tenemos que unirnos. Si a Alicante no llega agua en calidad y cantidad no habrá desarrollo futuro", sentenció Urbina.
Sobre la negativa de los agricultores tradicionales del Júcar (Usuj) de rechazar la opción de conectar el embalse de Tous con el Júcar-Vinalopó porque no hay agua sobrante, Urbina señaló que "estamos ante otra mentira. Tous ha estado veinte años sin regular. Se ha demostrado que existe caudal suficiente de julio a septiembre. Lo que habría que preguntar a los regantes de Valencia es por qué se han beneficiado de la modernización de la Acequia Real a costa del Júcar-Vinalopó y niegan agua de calidad a Alicante, pero no para Albacete, tanto para usos urbanos como para regar maíz subvencionado", denunció Ángel Urbina.
Los regantes han propuesto, sin éxito, la construcción de una segunda toma del agua para el trasvase Júcar-Vinalopó aprovechando los caudales que se vierten todos años al Júcar desde Tous y en que su mayoría acaban en el mar tras pasar por la Albufera de Valencia, según la Federación Provincial de Regantes.
Camps propone crear una red pública de suministro del agua
El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y su equipo encargado de la política hídrica (Juan Cotino) han logrado incluir en un documento del PP nacional que servirá como base para la elaboración del programa el electoral en el que se plantea la necesidad de crear una red española de suministro de agua, cuya función será posibilitar el abastecimiento de agua a las personas y a los sectores económicos en cualquier punto del territorio donde sea necesario. La entidad tendría unas funciones y un rango similar al de la Red Eléctrica Española, según consta en el documento al que ha tenido acceso este periódico. La constitución de la Autoridad Nacional del Agua (responsable del reparto de los recursos hídricos); la inversión de 9.700 millones de euros en obras hidráulicas en todo el Estado y adaptar la Directiva Marco del Agua a la realidad de la cuenca Mediterránea (prevención de la disminución de recursos por el cambio climático) son otros de los argumentos que completan el documento que se envió a Mariano Rajoy, presidente del PP. F. J. B.
