Mayte Vilaseca reconoce que está en ese instante de su vida donde el equilibro personal y la ilusión por su profesión llegan a un punto, quizás, que está muy cercano a la felicidad. "Es mi mejor momento, hay ese equilibrio entre experiencia y la energía para seguir inventando; tengo también más disponibilidad porque mis hijos (Julián, de 19 años, y Almudena, de 14) son ya mayores; y, además, tengo un equipo estable de profesionales con los que afrontar con garantía cualquier proyecto". Recuerda que llegó a Elche desde Madrid "con una beca cuando cursaba segundo de Periodismo, allí empezó todo y desde entonces Elche es mi cuidad".