La Universidad Miguel Hernández va a destinar un volumen de recursos superior a 400.000 euros para tratar de mejorar e impulsar sustancialmente la llegada de la tecnología que se genera en la universidad a las empresas y a la sociedad en general.

Para ello ha trasladado al Ministerio de Ciencia e Innovación un plan estratégico, con proyección hasta el año 2012, en el que se plantean una serie de actuaciones para fomentar la transferencia de tecnología por parte de la UMH en su entorno, partiendo de un detallado análisis DAFO (Debilidades-Amenazas-Fortalezas-Oportunidades) de los recursos y servicios actualmente dedicados a esta actividad.

La UMH presentó en su día este plan estratégico que el ministerio ha evaluado positivamente -sólo un 35% de los proyectos presentados a nivel nacional ha obtenido luz verde, según fuentes universitarias- y para el que ha autorizado una ayuda pública de 209.000 euros, la mitad del presupuesto necesario para ejecutar el plan.

"La sociedad desconoce las capacidades de la UMH", explica Emma Benlloch, directora de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la UMH, quien añade que "el investigador y la empresa se miran en principio con recelo".

Sin embargo, la idea última es que la sociedad aproveche todo el potencial investigador de la Universidad. "Europa está invirtiendo muchos euros en I+D+i y eso tiene que revertir a los ciudadanos", apunta Benlloch.

"Lo que no queremos es que la tecnología se quede en los informes. Si permanece en los cajones no avanzamos", reflexiona por su parte Mariano Almela, técnico de la OTRI.

En este sentido, este plan estratégico diseñado por la UMH y aprobado por Madrid se propone dos objetivos principales: incrementar los proyectos de colaboración con las empresas, a fin de que éstas se puedan aprovechar y utilizar la innovación y la tecnología que se genera en el campus; y aumentar el nivel de aprovechamiento de los resultados generados por los investigadores de la UMH, promoviendo las patentes y la extensión internacional de la mismas, pero principalmente fomentando su explotación, mediante licencias a terceros o apoyando la creación de nuevas empresas de base tecnológica.

Almela recuerda que "las empresas en tiempo de crisis recortan de donde les pueden sacar de ella, como es la I+D", por lo que "cortar las vías de futuro es un error".

Benlloch por su parte resalta que la alianza de la UMH con las empresas es estratégica. "Que las empresas no vengan aquí con prevenciones. Tienen todos las puertas abiertas, así como el acceso a los investigadores", para añadir que precisamente el trabajo de su oficina es hacer que la UMH sea muy permeable para el empresariado.