La piel, que habitualmente actúa como una barrera protectora del organismo, sufre el ataque de enfermedades que reducen la calidad de vida de muchas personas. En estos casos, puede resultar muy beneficioso la creación de una capa protectora, una segunda piel, que ayude a mitigar sus efectos y les permita realizar una vida normal. Esta idea ha llevado a la empresa ilicitana Portoelx a convertirse en la primera distribuidora de unas prendas de vestir creadas con los tejidos biofuncionales que un grupo de investigadores de la Universidad de Minho, en Portugal, descubrió a principios de siglo.

Compuesta por algodón natural, sales de plata y algas del mar del Norte, esta tela especial calma y reduce los síntomas de patologías como la dermatitis atópica, la psoriasis o la micosis, según se demostró en una serie de estudios realizados en el hospital San Marcos de Braga. Y, empleada para fabricar todo tipo de ropa interior o camisetas oclusivas, Portoelx tiene previsto distribuirla, en un plazo de unos quince días, entre unas 200 farmacias de toda la provincia y casi una decena de Elche. Más adelante, en un periodo de cuatro o cinco meses, tienen la intención de comercializarla en toda España y, en un futuro, no descartan exportarla a países con los que ya han entablado contacto como Reino Unido, Polonia o Japón.

Lorenzo Gómez, director comercial y administrativo de esta compañía que, desde su creación en octubre del pasado año, está ubicada en el Centros Europeo de Empresas Innovadoras (CEEI) de Elche, explica que su principal objetivo es "reducir las molestias de las personas que padecen estas enfermedades y mejorar su calidad de vida". Según cuenta, los informes que poseen muestran que, en Europa, dolencias como la psoriasis afectan a casi un 4,5 % de la población y la dermatitis atópica podría llegar hasta el 30% de los niños. Por eso, aunque reconoce que estos productos no pueden curarlas, asegura que sus efectos remiten hasta en un 80% tras ocho días si se usan a diario.