El segundo día de la romería del Rocío se celebró ayer en el Pantano bajo un intenso calor que no desanimó a los asistentes a disfrutar de las diferentes actividades programadas por la organización de la romería, la Casa de Andalucía.

Una de las actividades fue una exhibición ecuestre en honor a la Virgen del Rocío que hizo las delicias de los presentes. En total, 17 jinetes participaron en esta exhibición en la que mostraron el arte de la doma del caballo, de forma individual y acompañados por una bailaora. Los equinos, de pura raza española, realizaron durante más de dos horas carreras, paradas y bellos giros a las órdenes de sus jinetes. Pero no fue la única actividad celebrada ayer, por la tarde hubo una misa rociera cantada por el coro Gramaseca y por la noche actuó el cuadro de baile de la Casa de Andalucía. Antes, a mediodía, los organizadores cocinaron una gran paella para unas 100 personas, además de platos típicos andaluces. A medianoche estaba previsto que se celebrara el salto de la reja, tal y como se desarrolla en el municipio de Almonte, es decir, los hombres saltan una verja, en el caso del municipio andaluz de tres metros de altura y en Elche de un metro treinta centímetros, y los primeros en saltar son los afortunados que cogerán a la Blanca Paloma.

Para los andaluces afincados en Elche esta romería, que se celebra desde hace 21 años, es una forma de "estar más cerca de nuestra tierra", según manifestó el presidente de la Casa de Andalucía, José Jiménez. No obstante, son muchos los ilicitanos que cada año participan en esta romería y se unen a la fiesta de la Blanca Paloma instalando sus casetas en el paraje del pantano.

La Virgen del Rocío regresará esta tarde a su morada tras recibir durante todo el fin de semana el calor y la devoción de sus devotos, y lo hará como hizo el camino al Pantano, en romería hasta llegar a la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.