Cuando cuestiones como el uso del velo islámico en los centros educativos han impulsado el debate sobre la integración de los inmigrantes, el uso de la lengua sigue siendo un asunto fundamental para muchos en el ámbito educativo. Por eso, el catedrático de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Girona, Ignasi Vila, impartió ayer una conferencia en el Centro de Congreso de Ciutat d'Elx en la que reflexionó sobre la relación entre los procesos de alfabetización de los nuevos residentes, la promoción de las lenguas minoritarias y la cohesión social.

En una sociedad tan compleja y diversa como la actual, ¿qué importancia tiene la educación y el uso de los distintos idiomas?

En los Estados occidentales, donde actuamos como lugares de acogida, los blancos de clase media ejercemos un poder sobre los recién llegados que es difícil de controlar. Una de las mejores maneras de reequilibrar esta situación es promocionar sus lenguas de origen para que sea consciente de que puede actuar y alcanzar un reconocimiento social.

¿Qué métodos se pueden emplear para lograr este fin?

Existen mecanismos, como el denominado "dual language", que fomentan la alfabetización de las lenguas propias y las oficiales del país de acogida a través del desarrollo de habilidades relacionadas con la conciencia fonológica. En cualquier caso, estos procesos no se pueden alcanzar en poco tiempo, sino que requieren una proyección a largo plazo.

¿Pueden existir dificultades en los alumnos o en el profesorado?

Hasta el momento, ningún estudio ha demostrado que un niño tenga problemas para ser, por ejemplo, trilingüe, a edades muy tempranas. En los docentes, las dificultades para quien no conoce estas lenguas pueden ser mayores, pero se pueden solventar con la implicación de las familias en procesos de enseñanza de su propia cultura en colaboración con el centro educativo.

Muchos expertos coinciden en elogiar el pluringüismo, pero ¿qué ventajas individuales y sociales tiene en realidad?

El conocimiento de varias lenguas, que no siempre tienen que incluir el inglés, aporta beneficios individuales como el aumento de la creatividad, la capacidad de aprendizaje o la sensibilidad. Pero, sobre todo, a nivel social, es una de las claves para favorecer la cohesión social y la riqueza colectiva, así como para evitar la exclusión y la marginación.

Además de estos nuevos idiomas, en comunidades como la valenciana, existen dos lenguas oficiales. ¿Cuál cree que debe ser el modelo a seguir ante estas nuevas culturas?

Estos dos procesos de aprendizaje no son contradictorios, aunque se debe comenzar por las lenguas que se hablan en la comunidad. Además, en una heterogénea y plural, para que la gente sea capaz de gozar de sus derechos individuales y de conocer los dos idiomas oficiales, es necesario que la minoritaria, en este caso el catalán o valenciano, vertebren y rijan el sistema educativo.

¿Cómo valora la situación actual en este territorio?

En el País Valenciano, se prima lo que los estudiosos denominan un "mercado lingüístico" en el que no existe una voluntad política ni social. Esta situación empobrece la sociedad y contradice al propio Estatuto de Autonomía.