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El colegio Miguel de Cervantes cuenta esta semana con un invitado muy especial. El escritor Federico Martín, que la pasada semana deleitó a grandes y pequeños en el Blasco Ibáñez y que a final de semana estará en el Jaime Balmes, dedica sus esfuerzos "en acercar los libros a los niños, en animarles a a leer, en ofrecerles "el pan del alma"", explica este hacedor de sueños que asegura que los pequeños deben "manejar" los libros y manosearlos desde el vientre materno. Martín insiste en que las escuelas deben tener lugares "escondidos, templos laicos donde el libro y sus resultados sean los protagonistas del espacio".

Martín llega a la reunión con su maleta a cuestas llena de libros, con su gestualidad, con su voz, con sus versos y, sobre todo, con su amor por las letras. "Hoy hemos leído, oído y cantado poemas de Machado porque es el poeta de abril y de la República. El, junto a Juan Ramón Jiménez y Unamuno, son los grandes poetas de la modernidad y luego vienen los demás".

El objetivo de este especialista en literatura infantil es intentar que de una manera amena, sorprendente y accesible los más pequeños memoricen versos "a través de técnica pre socráticas que ya se utilizaban en Grecia cuando los niños aprendían un poema todos los días para llenar el cuerpo".

Federico Martín ofrecerá mañana miércoles una charla a los padres, a partir de las 8 de la tarde, bajo el título "A leer se empieza y se termina en casa", puesto que el escritor considera que los progenitores son los auténticos responsables del acto lector. "Cuando nace un niño lo primero que deberían hacer los padres es llevarlo al ayuntamiento para que les regalasen un libro, llevar al pequeño al centro de salud para comprobar su estado de salud y hacerlo socio de la biblioteca".

Martín, asimismo, presentará el jueves a partir de las 20 horas en la biblioteca Pep Sempere su nueva editorial denominada "Los libros de la mora encantada" con la que se trata de "recuperar" libros memorables. Su primera publicación será "Cuenta que te cuento", de la escritora chilena María de la Luz Uribe e ilustrado por Fernando Krahn.