El Instituto de Neurociencias de Alicante (INA) ha diseñado su nuevo plan estratégico que marca el camino a seguir hasta el año 2013. Entre los objetivos de esa hoja de ruta se encuentra convertir a este complejo investigador en un centro de excelencia en el espacio europeo de investigación.

El nuevo plan estratégico 2010-2013, el segundo del que se dota el INA, centro mixto de la Universidad Miguel Hernández y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), contempla tres objetivos específicos.

Uno es el de generar conocimiento fundamental que permita conocer el funcionamiento del sistema nervioso para poder entender cómo se pueden curar las patologías que le afectan.

En segundo lugar, el Instituto de Neurociencias persigue ser un "centro de excelencia de entrenamiento de investigadores jóvenes", de manera que atraiga a nuevas promesas de científicos procedentes de todo el mundo. De hecho, en 2008 inició un programa de doctorado internacional que implica cuatro años de investigación. En el pasado ejercicio accedieron al mismo 18 estudiantes, seis de ellos extranjeros.

Estas dos metas contribuirán a la tercera: mejorar aún más el centro, asentado en el campus de Sant Joan, para aumentar su posición de referencia en el contexto científico europeo y mundial.

Líneas de actuación

Este nuevo plan estratégico se sustancia en seis líneas de trabajo que delimitarán el tipo de investigaciones en las que se debe concentrar el conglomerado científico del INA.

Una línea es la que tiene que ver con la morfogénesis, es decir, el estudio de los procesos que organizan la distribución espacial de las células durante el desarrollo embrionario de un organismo.

Una segunda línea profundizará en la diferenciación neuronal y la especificación, que junto al tema anterior constituye uno de los aspectos fundamentales de la biología del desarrollo. Esto implica conocer cómo se diferencian y se ubican las neuronas en lugares correctos, y cómo se llega a esos lugares mediante movimientos migratorios.

Un tercer campo de investigación en el que está interesado el INA es el de la transducción sensorial y la nocicepción, que se centra en el estudio de la sensación de dolor periférico y el dolor que se origina a partir del frío y el calor.

La dirección de este complejo científico también ha apostado por el campo de la transmisión sináptica y la plasticidad, que abarca el estudio de la comunicación entre las neuronas y su modificación durante los procesos de aprendizaje.

Una quinta línea estratégica es la de neurobiología de sistemas, que abarca el estudio de los circuitos neuronales que funcionan dentro del propio sistema nervioso.

La sexta línea estratégica en la que se va a esforzar aún más el INA es la referente a las patologías del sistema nervioso.

Las seis líneas están entrelazadas y, además, convergen también con el citado programa de doctorado internacional.

El plan estratégico ha sido aprobado con una valoración excelente por parte de una comisión internacional integradada por una docena de científicos que han evaluado a este centro en el grupo de cabeza de los equipos nacionales en el área de biomedicina.

El Instituto de Neurociencias fue oficialmente fundado en febrero de 1990 por el Gobierno autonómico, como un instituto universitario perteneciente a la Universidad de Alicante. En 1997, con la segregación, pasó a pertenecer a la Universidad de Elche.