Gabriel Corozo comienza a ver la luz al final del túnel. Tras pasar la revisión el pasado día 1 de febrero, los galenos franjiveres le marcaron un tiempo de recuperación final de ocho semanas. El defensa ecuatoriano ya lleva seis y está muy cerca ser útil para Pacheta. Corozo lleva varios días pisando césped, trabajando con el readaptador, e incluso hoy se ha incorporado con el grupo. Los compañeros lo han recibido con los brazos abiertos conscientes de lo mal que lo ha pasado en los últimos meses en la sombra. "Estoy contento porque tengo toda la plantilla a mi disposición. Corozo ya está con nosotros", afirma Pacheta.

El lateral fue operado a finales de noviembre de una fractura osteocondral del fémur de la rodilla derecha por los doctores Pedro Luis Ripoll, Mariano de Prado y César Quesada. El jugador franjiverde se lesionó en un entrenamiento en octubre y tras comprobar que el tratamiento conservador no tenía una evolución positiva se determinó que lo mejor para su recuperación era la operación.

Tras el postoperatorio, Corozo inició su recuperación en ´Ripoll y De Prado Sport Clinic´ en los bajos del estadio Martínez Valero. El futbolista del Elche CF, reflejaba entonces en su cuenta personal de Twitter su sentir antes de entrar en la sala de operaciones: "Que sea lo que Dios quiera, que de esta hay que levantarse".

Los meses han pasado y tras un largo y costoso calvario ya está ahí, muy cerca de ser útil al equipo en la parte importante de la temporada. No ha sido nada fácil el peregrinaje, pero Corozo ya va comprobando que su lesión está ya muy cerca de ser olvidada. Falta la puesta a punto final y coger el tono físico adecuado para competir.

Corozo sólo ha jugado 28 minutos como franjiverde en el duelo de Copa del Rey frente a la Cultural de Durango. El equipo comenzó mal el partido y Vicente Mir, entonces técnico ilicitano, lo sustituyó por Sory Kaba antes del descanso. No ha debutado en la Liga.