Los primeros 45 minutos en El Collao ante el Alcoyano de Mario Barrera entraron por los ojos de los más de 500 seguidores franjiverdes que acudieron a presenciar el partido en Alcoy. Más de uno se pellizcó al ver la intensidad de su equipo y la idea de ir a por el rival desde el pitido inicial. El Elche siempre quiso crecer a través del balón, independientemente del rival y del tipo de campo en el que se desarrollaba el partido, fue un equipo competitivo y que siempre supo lo que quiso. En apenas 15 días el técnico José Rojo, Pacheta, ha logrado cambiar mucho la imagen del equipo, pero como él mismo afirmó al final del duelo del domingo «no se puede conseguir todo en dos semanas, pero estamos en un camino interesante. La sensación es que competimos».

Hubo lagunas que hay que intentar hacer desaparecer. No hay que olvidar que el Elche perdió durante los primeros 15 minutos de la segunda parte el balón y lo pagó caro ya que el Alcoyano le empató en la segunda parte. Luego fue un querer y no poder del conjunto franjiverde, lo que demuestra que todavía hay un largo trecho para conseguir el nivel adecuado.

El mensaje cala

El mensaje del técnico ha comenzado a calar en la plantilla

Los futbolistas reconocen que el camino marcado por Pacheta es el indicado y consideran que se está en la buena dirección y no olvidan que hace tan sólo dos semanas tocaron fondo en El Clariano y, ahora, las sensaciones que transmite el equipo son muy diferentes. Jony Ñíguez no dudaba en asegurar, al final del encuentro en Alcoy, en que «hemos dado un salto cualitativo». Seguidamente, destacaba la gran primera parte realizada por el equipo ante el Alcoyano. Su compañero, el central Gonzalo Verdú, afirmaba que «trabajamos y nos lo creemos, pero debemos insistir para completar todo el partido a un buen nivel».

Una prueba evidente de que el mensaje del técnico franjiverde está calando. Antes de jugar en Alcoy confesó en sala de Prensa lo siguiente: ¿Qué más me da el Camp Nou o El Collao? Hay que jugar con el balón». Dicho y hecho. Ante el Alcoyano salió a tener el balón, consciente de que iba a ser un partido «durísimo» y a jugar sin miedo. Ese es el camino. Predicar con el ejemplo. Intentar plasmar en cada partido lo trabajado cada semana. Ha quedado demostrado que se puede avanzar por él hacia el objetivo marcado y no hay tiempo que perder.

Desconexiones

El equipo ha demostrado tener un gran margen de mejora

El equipo franjiverde sigue teniendo desconexiones a lo largo de un partido que debe tratar de minimizar a la mínima expresión con el paso de los partidos. El Elche debió sentenciar el duelo en la primera parte y, en la segunda, es lógico que el rival vaya a por todas tratando de remontar y más en un recinto como El Collao. No es que el equipo saliera relajado, sino que el rival metió una marcha más de intensidad y el Elche perdió por instantes el balón. El juego directo del rival sobre un «nueve» referencia como Mariano Sanz y el juego entre líneas de López Silva dejó sin balón al equipo de Pacheta. Por un instante el Elche no fue el equipo que quiere el burgalés y lo pagó caro. Con el empate a uno se volvió a la idea inicial, pero ya no se tuvo la frescura de la primera parte para desequilibrar por banda y la lesión de Josan, que se unía a la ausencia de Collantes, se notaron en exceso. Pero la clave está en insistir en esa idea hasta el final sin perder la calma y conscientes de que se ha acertado en el método.

Mecanismos adquiridos

Lo que funciona no hay motivo para tocarlo

Pacheta es fiel a su estilo de juego y dijo el primer día que lo que funciona no se toca y con ese argumento tratar de sacar lo mejor de su plantilla. Apostó por un 4-1-4-1 y con él ha jugado los dos partidos de Liga que lleva en el banquillo franjiverde. Las lesiones de Collantes y Manuel Sánchez obligaron a poner a Josan y Jony. Un simple cambio de piezas que refuerzan el trabajo diario y los conceptos futbolísticos del equipo y de los jugadores. No basta con decir que somos el Elche. Hay que demostrarlo, primero, siendo igual de intenso o más que los conttrarios. Y segundo, tratando de sacar el máximo rendimiento de los jugadores en cada partido. En calidad hay pocos rivales que puedan superar al equipo ilicitano. Con ese cóctel el Elche debe llegar al play off con todas sus piezas encajadas y a pleno rendimiento.

Un duro calendario

Veintisiete puntos en juego y ante los mejores del grupo

El Elche iniciará la recta final de la temporada con cuatro puntos de ventaja sobre el Lleida, que es quinto en la tabla. Los ilicitanos tienen por delante nueve encuentros para confirmar su presencia en el deseado play off de ascenso y un triunfo frente al Cornellà reforzaría el discurso del recién llegado Pacheta y permitiría consolidarse en la parte alta de la tabla. Empieza la hora de la verdad para los franjiverdes, que tienen por delante nueve auténticas finales para asegurarse una plaza en la zona de privilegio. Equipos que luchan por el mismo objetivo, como el citado Cornellà, Villarreal B, Mallorca y Lleida, además del Hércules, tienen que pasar por el coliseo ilicitano de aquí al final de la Liga regular.

Los ilicitanos deben visitar los campos de Ebro, Formentera, Valencia-Mestalla y Olot.