José Rojo «Pacheta» ya sintoniza con los jugadores. Se nota en el ambiente. Mira a los futbolistas a los ojos, les explica lo que quiere y les muestra el camino. Da la impresión que el mejor legado que ha dejado Josico en el Elche ha sido su rueda de prensa de despedida señalando a la plantilla. Los ha motivado tanto a todos que incluso el capitán, Gonzalo Verdú, no dudó en señalar que su salida «era el motivo que necesitaba la plantilla para creer y estar convencido al 100% que podemos ascender».

Hay que pasar de las palabras a los hechos y ayer Pacheta se puso manos a la masa en esa dirección. Resultó clarificador presenciar el primer entrenamiento del burgalés en el Martínez Valero. Hora y media muy intensa, para sacar conclusiones positivas, aunque luego son los resultados los que hace buenos o malos a los técnicos. Es la ley del fútbol.

El objetivo está claro y no hay tiempo que perder. El técnico castellano insistió en su sistema defensivo, con la presión como principal obsesión. «Hay que redoblar el esfuerzo en la presión y minimizar errores o hacerlos lejos de nuestra portería», insistió una y mil veces en una sesión intensa en la que nadie se relajó un segundo. Se juega como se entrena y Pacheta enseña el camino a los suyos tratando de convencerles de que por ahí se llega a la tierra prometida. Su intención no es otra que la de llevárselos al huerto con frases como estas: «Presionamos arriba, recuperamos y triki, triki, y al camión; y los niños de Nino a comer».

«No me guardo un esfuerzo, voy a por todas como un jabato y ataco como un puto animal», insistió a su jugadores a la hora de ensayar cómo se ahoga la salida con balón del rival. «No les dejamos ni que levanten la cabeza», les recordó.

No faltaron las flexiones de los grupos que no cumplían con su cometido con el fin de incentivar todavía más a los jugadores.

Una vez finalizada la sesión, fue saludando uno a uno a sus pupilos y se despidió de ellos así: «Nos vemos mañana chicos», no sin antes hacer un círculo con ellos y darles las últimas consignas.

Primera página del método Pacheta. Hoy, la segunda. Que no falte nadie a clase. Mano de hierro, con guante de seda.

De nuevo, los entrenamientos vuelven a ser grabados, como hacía Vicente Mir. Esta tarea ha sido encomendada a Chema Monzón. Su intención no es otra que revisar y, posteriormente, corregir, los defectos. Jorge Cordero, Mantecón y Jesús García tampoco perdieron detalle de la sesión.

Frases de Pacheta:

-Presionamos arriba, recuperamos, y triki, triki y al camión; y los niños de Nino a comer.

-No les dejamos ni que levanten la cabeza y atacamos como un puto animal.

-Sory Kaba, ¿te han rascado? Si te rascan le coges la matrícula.

-Máximo esfuerzo en la presión. No me guardo nada y voy a por todas como un puto jabato.

-A ver ¿quién es el último que se sienta? ¿Los verdes? Pues cinco flexiones.

-Collantes, hay que ir hasta el final y terminar las jugadas. ¡A por todas!

-Tenemos que presionar arriba y minimizar errores.

-¡Vámonos! ¿Tenéis hambre? Nos vemos mañana, chicos.