La sección de fútbol sala del Elche CF está teniendo una temporada difícil y ha pasado de intentar luchar por meterse en el play off de ascenso y hacerlo por lograr la permanencia en Segunda División.

La llegada de Carlos Sánchez al banquillo, sustituyendo a Pablo Conejero, tampoco ha enderezado el rumbo, a pesar de que el equipo ilicitano ha mejorado en algunas cosas. El técnico madrileño lamenta que "el gol hay que pagarlo y cuando tú no marcas y el rival sí es difícil ganar. La desesperación nos te hace fallar".

El preparador franjiverde tiene claro que "tenemos que suplir la falta de gol con mucho trabajo, dándolo todo, y si tenemos que crear doscientas ocasiones para meter tres, tendremos que crear 200”.

El Elche, que está justo un puesto fuera de los puestos de descenso, con siete puntos, los mismos que el Prone Lugo y el Noia, que son antepénultimo y penúltimo, respectivamente; afrontará el domingo (15.30 horas) el penúltimo partido de la primera vuelta de la Liga. Los ilicitanos viajan hasta Córdoba, para medirse al Itea, que es décimo primero, pero con 17 puntos, diez más que los franjiverdes.

Después de la bajas de Juanjo, Pitu y Carlos Sabater, que decidieron dejar la plantilla, Carlos Sánchez sólo tiene once jugadores disponibles y tendrá que echar mano de los juveniles Raúl y Álvaro, que en el último encuentro ya estuvieron con el primer equipo.