Fue bonito mientras duró. Así reza el epitafio. El Elche sólo aguantó ayer en el Wanda Metropolitano 31 minutos. Justo el tiempo que tardó el Atlético en marcar Giménez el primer gol, en una jugada de estrategia. Esa diana, que vino acompañada por la de Fernando Torres, dos minutos más tarde, dejaron la eliminatoria copera prácticamente sentenciada en un abrir y cerrar de ojos.
Lo del conjunto ilicitano fue un querer y no poder ante un rival que no entiende de rivales de Liga de Campeones, Primera, Segunda o Segunda B. A todos les aplica la misma pócima: la presión, el trabajo y la intensidad. A partir de ahí, la calidad se impone y eso sucedió ayer frente a los franjiverdes.
La primera parte no fue mala del equipo de Josico, que apostó por la posesión de balón para no verse arrollados por el rodillo rojiblanco, aunque lo de llegar al área de Moyá fue una empresa imposible. Dos chispazos colchonero bastaron para cerrar la eliminatoria antes del descanso.
En el segundo tiempo, el partido bajó en intensidad y ambos conjuntos pensaron en otras guerras con la eliminatoria ya decidida. Tan solo Fernando Torres, que hizo un segundo gol y el meta Guille Vallego, con tres paradas muy buenas llamaron a la puerta del futuro de Simeone y Josico.
Inicio rojiblanco a todo tren
El Atlético comenzó sin contemplaciones dispuesto a decantar la eliminatoria de su lado con una buena jugada de ataque en la que Vietto, en el minuto 2, dibujó un tiro cruzado desde la derecha que se marchó fuera por muy poco.
Josico ya anunció el martes que el equipo rojiblanco es intenso y siempre que paras el vídeo está bien colocado. Comenzó con Griezmann y Saúl Ñíguez en el banco, pero con un once muy competitivo y demostrando que no se fiaba del Elche. Ya le pegó un susto en la ida, sobre todo en la segunda parte, y no dio margen a la posible hazaña.
Los ilicitanos aguantaron el primer empujón y le disputaron el balón a los de Simeone en la medular. El preparador franjiverde colocó a Gonzalo Verdú en el doble pivote junto a Provencio, mientras que el dúo de centrales lo formaron Golobart y Edu Albacar. Diego Benito case situó escorado en banda izquierda en la medular e Iván Sánchez intentó surcar por la derecha, con Nino y Sory Kaba en punta.
El equipo ilicitano se mantuvo armado mientras los colchoneros trataron de desequilibrar en pequeños arreones, pero sin crear peligro en el área de Guille hasta que Koke, en el 25, desde fuera del área enganchó un potente chut que se estrelló en el poste izquierdo de la portería del Elche.
A la salida de un córner, el central Giménez, en el segundo palo, se elevó por encima de los centrales y firmaba el primer gol de la noche del estreno copero del Wanda Metropolitano.
Esta diana vino acompañada por una segunda, dos minutos más tarde, obra de Fernando Torres. Guille Vallejo despejó un balón y el internacional rojiblanco aprovechó el rechace para tomar más ventaja en el marcador.
El 2-0 provocó un bajón en los franjiverdes al comprobar que el sueño de eliminar al Atlético se esfumaba. Poco a poco el equipo ilicitano supo salir de su depresión y terminó de forma digna la primera parte. Incluso Nino se atrevió, en el 40, a forzar un disparo desde fuera del área que terminó en la grada.
Tras el descanso, Josico puso en el campo a Adrián y Javi Flores en lugar de Peris y Diego Benito, pero no varió su dibujo táctico. El Elche siguió a lo suyo, tratando de tener el balón y evitar que el Atleti llegara a la zona de tres cuartos con huecos para desequilibrar.
El partido pegó un bajón ya que, con la eliminatoria resuelta, los pupilos de Simeone decidieron reservar energías para próximas batallas. No obstante, Fernando Torres, un poco olvidado en la Liga, siguió a lo suyo. Perdonó un gol casi hecho en 64, pero rubricó el segundo personal de la noche en el 66. Provocó que los suyos le cantarán el conocido «Fernando Torres...».
Incluso, pudo firmar el tercero en el 77, pero el portero franjiverde estuvo sensacional en un mano a mano. Dos minutos más tarde, Guille Vallejo evitó otra vez el tercero a disparo a bocajarro de Vietto.
El guardameta cedido por la Cultural Leonesa sí que demostró a Josico que puede jugar en este equipo.
Tras un inicio titubeante evitó en la segunda parte que el Atlético hiciera más goles. Al menos el meta suplente demostró que está ahí y que José Juan, hasta ahora titular en la Liga, no se puede dormir en los laureles.
El Lleida da la sorpresa
Ahora toca recuperarse para el domingo lo antes posible. Espera el Lleida, que ayer remontó un 2-0 en contra a la Real Sociedad y eliminó a un rival de Liga Europa (2-3). El equipo catalán llevaba en la Liga nada menos que seis jornadas sin ganar y seis sin hacer un gol. Van a recibir a los ilicitanos con el depósito lleno de moral. Ahí Josico y los suyos ya están obligados a sumar los tres puntos. Con semana y medio al frente del equipo el preparador manchego cuenta con mayores elementos de juicio para alinear al mejor once posible.
