El estadio Martínez Valero fue ayer otra fiesta. A la afición lo que le gusta es ver ganar a su equipo y, en ese sentido, a pesar de estar en Segunda División B, en este inicio de temporada está disfrutando.

El coliseo ilicitano registró la mejor asistencia de público de temporada, con 7.565 espectadores, y los seguidores están, cada vez, más enganchados con su equipo. Además, la grada de animación le está dando los cánticos que se echaban de menos y que contagian al resto del campo.

Los aficionados disfrutaron y se divirtieron viendo a su equipo marcar cuatro goles -lleva 12 en los tres partidos que ha disputado hasta ahora, entre Liga y Copa en el Martínez Valero- y los aplausos y vítores a sus futbolistas no faltaron.

En los últimos minutos y sabedores de que el Elche ya era líder en la clasificación, los decibelios aumentaron, terminaron con gritos de «¡Elche!, ¡Elche!», cantando el «Aromas Ilicitanos» y también hubo recuerdos para el Hércules, como calentamiento del encuentro de la tercera eliminatoria de la Copa del Rey del próximo 20 de septiembre en el Rico Pérez, con el clásico «herculano el que no bote». Fue una tarde perfecta en las gradas.

El vestuario de José Juan

El colegiado murciano Gallego Gambín se mostró muy meticuloso ayer con la equipación roja de José Juan porque tanto en Peralada como él mismo llevaban colores anaranjados, lo que obligó al guardameta franjiverde a disputar el encuentro con los pantalones blancos y las calzas blancas de los futbolistas de campo.

Por su parte, el cuerpo técnico estrenó unos polos rojos con ribetes en el cuello negro.

Antes del partido, el presidente, Diego García, el director deportivo, Jorge Cordero, el secretario técnico, Mantecón, y el consejero Ramón Segarra estuvieron dialogando, a pie de campo, con el entrendor Vicente Mir.