Nino, a pesar de sus 37 años, continúa siendo el más listo de la clase y ayer fue determinante en la primera victoria de la temporada para el Elche. Una asistencia en el primer gol, en el que le dijo a Benja: toma meteló; y dos tantos en apenas dos minutos dejaron encarrilado el triunfo de los franjiverdes que se mostraron muy superiores al Badalona.

Los ilicitanos, por momentos, sacaron a relucir un juego brillante que encandiló a los seguidores. Pero lo más importante fue que comenzaron a demostrar su mayor calidad con respecto a su rivales y desde el pitido inicial quedó patente que el partido y la superioridad iba a quedar de manifiesto conforme fuese madurando el encuentro.

Y así fue, al conjunto de Vicente Mir le bastaron con los primeros 45 minutos para llevar los tres puntos al zurrón y, a la vez, advertir que este Elche va muy en serio y que su condición de favorito ya está fuera de toda duda. Además, los aficionados se divirtieron y disfrutaron con su equipo después de mucho tiempo y de las penurias de la pasada campaña.

Javi Flores, organizador

Javi FloresEn su primer encuentro en el Martínez Valero, el técnico franjiverde apostó de salida por un equipo muy ofensivo. Mir realizó dos cambios con respecto al once inicial que jugó en Sabadell. Primi ocupó la plaza de Golobart en el centro de la defensa, mientras que Javi Flores dejó la banda izquierda y se situó en el puesto de Provencio, actuando como centrocampista organizador, por delante de Manuel Sánchez, que ejerció como único pivote. Eso provocó que el equipo ilicitano jugase con dos extremos abiertos como fueron Collantes, quien debutó de titular, por la derecha; e Iván Sánchez, por la izquierda. Nino y Benja cuentan en este inicio de Liga con la confianza del preparador para ser la referencia ofensiva.

El Elche comenzó el partido con tranquilidad, moviendo la pelota y sabedor de que su calidad terminaría imponiéndose. El Badalona aguantó 20 minutos defendiéndose con orden. Hasta que en el minuto 24, Javi Flores metió un balón al área para Nino, quien controló la pelota y se lo dejó para que Benja marcase a placer.

Tras el tanto de los ilicitanos, los catalanes intentaron estirar un poco líneas aprovechando que Manuel Sánchez se encontraba solo como mediocentro y la mejor virtud de Javi Flores no es defender, aunque se esforzó. Pero fue más voluntad que acierto porque José Juan apenas intervino.

En esta categoría los errores se pagan y la calidad se impone más que en otros. Eso pasó en apenas dos minutos en los que Nino recuperó su idilio con el gol y sentenció el encuentro por la vía rápida.

A pesar de la ventaja, los ilicitanos salieron tras el descanso con brío. Nino tuvo el tercero de su cuenta particular, tras aprovechar otro error del rival, pero en esta ocasión le detuvo el balón Morales.

El Badalona, con todo perdido, trató de estirar líneas y Kevin Lacruz, su futbolista más peligroso, provocó una magnífica estirada de José Juan, quien, a pesar de no haber intervenido en todo el encuentro, se quiso unir a la fiesta. Collantes también puso su firma marcando el cuarto.

Fue entonces cuando el Elche, por inercia, levantó un poco el pie del acelerador. Algo que unido al hecho de jugar con un centro del campo muy ofensivo, permitió a los catalanes adueñarse por unos instantes del choque y marcar el gol del honor.

Reforzar el centro del campo

Aunque había una amplia diferencia en el marcador, a Mir no le gustaba lo que estaba viendo y decidió reestructurar el equipo y reforzar el centro del campo dando entrada a Provencio por Benja. Javi Flores se situó en la mediapunta y Nino se quedó como única referencia ofensiva.

Ahí, el Elche volvió a recuperar el dominio y a ejercer su papel de favorito. Incluso, algunos jugadores quisieron gustarse ante el aplauso de la grada.

El encuentro estaba ya entonces cuesta abajo y sin nada que resolver. El técnico franjiverde decidió que era el momento de dar entrada a Sory Kaba -el canterano es muy querido por la afición- y el guineano se encargó de revolucionar la última fase del partido a base de presión y entrega.

Si la semana pasada en Sabadell, el gol fue la asignatura pendiente, en esta ocasión los delanteros sí que fueron protagonistas. Benja inauguró el marcador, Nino anotó dos, Collantes demostró que también puede marcar desde la segunda línea y, por si faltaba poco, Sory Kaba se inventó una bonita vaselina desde la frontal del área que fulminó a Morales, anontando el quinto que redondeó el marcador.

La fiesta fue completa, el estreno en casa inmejorable, pero en el fútbol no se vive del pasado y ahora llega el partido de la primera eliminatoria de la Copa del Rey, en el que los franjiverdes se volverán a enfrentar al Badalona, pero, en esta ocasión, en terreno catalán.

Aunque será un partido distinto, si el Elche mantiene el nivel de ayer no habrá problemas para sumar una nueva victoria. De momento, ayer llegó la sonrisa.