El fútbol es un deporte universal que levanta pasiones en todos los lugares del mundo. Por ello, muchas veces se echa mano de la aureola de la fama que rodea el balompié para ayudar a los más necesitados y hacer felices y sacar una sonrisa sobre todo a los niños.

El Elche se ha caracterizado en los últimos años por tener un compromiso social y de solidaridad, especialmente a través de su fútbol base y de los trabajadores de la entidad, encabezados por Jorge Pérez y Antonio Chaves.

A principio de verano y como ya viene siendo habitual, el área de la cantera envió un buen paquete de material deportivo con camisetas, chandals, sudaderas, espinilleras, etc para los niños de Guinea Ecuatorial a través del exfutbolista del Valladolid y del Betis Benjamín Zarandona.

Unos regalos que han provocado que en el país africano el Elche cuente ya con un puñado de aficionados más. Los más pequeños no han dudado en ponerse los chandals del Elche y mandar un saludo junto a Benjamín.

La temporada pasada, dentro del proyecto «Botas Solidarias», los jugadores de la cantera del Elche, en colaboración con Calzados Moya, donaron botas de fútbol y camisetas y hace algunos años, a través de Bodipo también se recogió material escolar para los niños guineanos.

Benjamín asegura que el Elche es uno de los clubes de fútbol que más colabora con los niños de su país y está muy agradecido con la entidad ilicitana.

La solidaridad del club franjiverde también quedó de manifiesto el pasado sábado con la asistencia de más de 50 niños saharauis que están pasando el verano en la ciudad gracias a la Asociación de Ayuda al Sáhara Occidental de Elche. Los niños y niñas se lo pasaron en grande en el estadio Martínez Valero donde lucieron una bandera del Sahara y otra del Elche.

Además, desde el club ilicitano también se colabora con distintos centros de discapacitados de la provincia y con el proyecto deportivo para la convivencia del Instituto Monserrat Roig, que busca mejorar las conductas de los alumnos tanto dentro como fuera de las aulas. Un grupo de jóvenes acude semanalmente a ayudar en las tareas de mantenimiento del estadio Martínez Valero y, posteriormente son invitados a los partidos. Y es que la grandeza del fútbol va más allá del deporte.