José Juan Figueras confesó ayer en su presentación como nuevo portero del Elche que llega con ilusiones renovadas y con el reto de lograr el ascenso a Segunda División con el conjunto ilicitano. El guardameta, que durante las cinco últimas temporadas defendió la portería del Lugo, confesó que aceptó la oferta de la entidad porque se sintió atraído por el «proyecto deportivo que me propuso Jorge Cordero».

Dejo claro que «me gustan los retos y vengo con mucha ilusión para intentar llevar al Elche a Segunda», comentó José Juan, quien elogió las instalaciones del club, ya que las definió como «de Primera División».

Asume que la categoría «es muy complicada» pero está seguro de que el Elche va luchar por regresar a la de plata. «El escudo no vale y los puntos se ganan en el campo. Van a existir rivales complicados como Mallorca o Sabadell y tendremos que salir siempre a tope. Los partidos los ganan los jugadores y hay que ser once guerreros sobre el césped».

Entiende que «la clave del ascenso pasa por ser «sólido en defensa» ya que considera que el equipo tendrá calidad para crear ocasiones de gol. Además, destaca la importancia de formar un «buen grupo humano» en la plantilla, ya que indicó que «lo demás llega solo».

José Juan, de 38 años, restó importancia a su edad y dijo que se ve capaz de seguir «jugando durante muchas temporadas más. Cada año bajo de peso y me siento más rápido».

Seguidamente, cuando fue preguntado por sus características bajo los palos dijo que «no destaco en nada y soy completo en todo».

Finalmente, reconoció que el hecho de que su competidor en puesto vaya a ser un sub 23 no le garantiza ser fijo en el once de Vicente Mir. «No vengo ni como titular, ni como suplente. Aquí somos una plantilla, un grupo que tiene que luchar unido para llevar al Elche a Segunda», sentenció.