Germán Parreño jugó el sábado ante el Oviedo su segundo partido de Liga bajo los palos en el Elche. El meta nacido en Elche se estrenó en Anduva ante el Mirandés (1-0), campo donde también jugó en la Copa del Rey (2-2), duelo en el que debuto el penalti que clasificó al equipo a la siguiente ronda. Seguidamente estuvo también ante el Alcorcón (0-1) en el torneo del K.0. en el Martínez Valero.

Acaba contrato el 30 de junio, pero no está descartada su marcha. Germán ha afirmado que "Elche es mi casa, mi ciudad, y donde está mi familia. Hay que valorar todo". No obstante, entiende que es "pronto" para tomar ninguna decisión porque en el club todavía no se ha puesto en marcha el nuevo proyecto.

Entiende que en Segunda División B el club ilicitano "hará un equipo muy competitivo con el fin de poder regresar lo antes posible a Segunda". Avisa que la categoría de bronce "es muy difícil ya que compiten 80 equipos y solo suben cuatro".

Finalmente, Germán Parreño asume que la temporada en el Elche ha sido complicada y difícil, pero, a partir de ahora, lo hay que hacer es "borrón y cuenta nueva para pensar en nuevos objetivos".