¿Cómo se encuentra después de una semana tan difícil?

Tanto profesional como personalmente bastante frustrado. Cuando cogí el equipo sabía que había dificultades, pero también que había una opción clara de haber sumado tres o cuatro puntos y sacar al equipo adelante. Pensaba que con los partidos de casa podía sacar esto adelante y asumo mi responsabilidad. La derrota frente al Mirandés nos marcó.

¿Esperaba encontrarse otro Elche cuando sustituye a Toril?

Sí. Te lo tengo que decir como es, creía que había otras cosas. Además, esperaba recuperar a Dorca y lo de la ficha de Mandi me enteré el día que me hice cargo del grupo. Desde el punto de vista táctico no he tenido un seis a pesar de que Álex Fernández y Josete han hecho un esfuerzo enorme en esa demarcación. Ese ha sido uno de los problemas de este equipo durante todo el año. También entiendo que ha existido un problema físico. Hemos empujado todo lo que hemos podido. En los últimos partidos se ha visto al menos intensidad y no esa sensación de que no puedes llegar a los últimos minutos. Los jugadores también lo sabían y han dado mucho en ese sentido en estas semanas conmigo.

Entonces, ¿la plantilla estaba muy mal físicamente?

Yo solo sé que las planificaciones de equipo siempre las hago para llegar al último tercio y que los jugadores vuelen y eso se trabaja en el día a día, en la exigencia y apretrando en cada jornada de entrenamiento. Yo creo que no hemos llegado en las condiciones físicas más adecuadas a este último tramo final.

¿Los jugadores lo han dado todo con usted en el banquillo?

En mis cincos semanas sí. Yo sé lo que se habla, lo que se comenta del tema de los grupos dentro del vestuario, que si esto, que si el otro? En el tiempo que llevo aquí no ha existido ninguna división. Desde el primer instante que entré aquí me encontré un grupo responsable. Conmigo lo han dado todo, conscientes de ´lo que nos estábamos jugando y que había que empujar todos para sacarlo. Siempre ha existido predisposición a trabajar.

¿No hubiera sido mejor rechazar la oferta del club y que otro técnico cargara con el muerto?

Hubiera sido mezquino por mi parte haberme quedado a la sombra a esperar otra oportunidad. Es algo que no quiero hacer ni como entrenador ni como persona. No me sentiría bien conmigo mismo frotándome las manos esperando. El que haga eso no es del Elche. Y yo me siento del Elche.

A partir de ahora, ¿qué va a hacer Vicente Parras?

Todo lo vivido en estas semanas debe llevarme a aprender de la experiencia y reforzar en cosas que yo siempre había pensado y que ahora he confirmado. Tenía muy claro que la exigencia es básica, tanto dentro como fuera del campo, así como el control del vestuario y del grupo. Todo ello hay que llevarlo por el camino correcto, para que no se tuerza, porque luego es imposible de enderezar. Cuando vuelva a entrenar un equipo, mi nivel de exigencia va a ser todavía mayor, tanto para mi cuerpo técnico, como para mis jugadores y toda la gente que hay alrededor del equipo. Es la única manera de conseguir objetivos.