El próximo lunes, 5 de junio se cumplirán dos años desde que el Juez Único de Disciplina Social de la LFP, Manuel Rivero González, hizo oficial la sanción de hacer descender al Elche a Segunda División por «el mantenimiento de deudas por parte de dicha entidad con la Agencia Estatal de la Administración Tributaria (AEAT)».

Una larga pesadilla que ha conducido al club a uno de los momentos más críticos de su historia y que el martes vivió su último capítulo cuando la jueza Eva María Alfageme dejó claro en su sentencia que al Elche no se le devuelve a Primera y que el descenso vino provocado por el daño causado a la lealtad de la competición y no por el impago a última hora a Hacienda.

Ya en su día, la LFP confirmó la resolución del expediente incoado el 16 de abril contra la entidad franjiverde «al existir reincidencia en su proceder, puesto que ya había sido sancionada la pasada temporada y la presente como consecuencia de la comisión de diferentes infracciones muy graves, según la Ley del Deporte y los Estatutos Sociales de la Liga».

A tal efecto, la resolución ponía de manifiesto que, «el Elche continúa manteniendo deuda líquida, vencida y exigible con la AEAT, que no está ni abonada, ni aplazada, ni garantizada». También, dicha resolución, ponía un enlace a un documento que hacía referencia al hecho de que el consejo de administración del Elche saliente fue sancionado por el mismo Juez de Disciplina Social de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), con la inhabilitación durante 18 meses al presidente del club, José Sepulcre, y al resto del órgano rector por irregularidades contables en el presupuesto de la anterior temporada.

Seguidamente, el Elche decidió realizar los trámites para regularizar la deuda mantenida con la AEAT, obteniendo un certificado de fecha 22 de junio de 2015. Un día después de obtener tal documento, el club interpuso recurso ante el TAD frente a la resolución dictada por el Juez Único .

Unas semanas más tarde, el 13 de julio, el Tribunal de Arbitraje Deportivo daba la razón al Juez Único de la LFP y confirmaba el descenso administrativo del Elche. Ante esta nueva tesitura, el club interpuso el 14 de julio de 2015 recurso contencioso administrativo frente a tal resolución correspondiendo su conocimiento al Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo nº 9 de Madrid. Además de ello, el club presentó una solicitud de la adopción de medidas cautelarísimas ante la jueza Eva María Alfageme, la cual fue desestimada íntegramente, mediante un Auto de fecha 21 de julio de 2015, al considerar que no concurrían circunstancias que justificaran el mantenimiento de la medida de suspensión.

Y el pasado martes, el Juzgado Central de lo Contencioso desestimaba el recurso del Elche por el descenso administrativo y confirmaba la resolución del TAD que acordó el descenso del equipo a Segunda en julio de 2015.

Dos años de auténtica pesadilla que parecen no tener fin. El lunes se cumplirán dos años del descenso y podría darse la circunstancia que el club lo hiciera ya en Segunda B si no se gana en Cádiz.