Vicente Parras, entrenador del Elche CF, dejó claro ayer que la plantilla es consciente de que «no es momento de mirar atrás» y dijo que «todos tenemos muchas ganas de que llegue la hora del partido ». La derrota frente al Mirandés ya es historia y con una mentalidad positiva se va afrontar el duelo de esta noche. Asume que la semana ha sido complicada para el grupo, pero entiende el preparador que si otros equipos han logrado salir de una situación comprometida en la clasificación a lo largo de esta temporada, el conjunto franjiverde también está capacitado para hacerlo en los cuatro partidos que quedan para terminar la Liga. «La frustración del otro día, tras caer con el Mirandés, fue grande, pero no podemos destruirnos. Si otros equipos que parecían hundidos han logrado reanimarse, nosotros también. De esta situación tenemos que salir nosotros y nadie va a venir a sacarnos. Quedan cuatro jornadas muy duras y tenemos que pelearlas hasta el final», apuntó el preparador ilicitano.

ha insistido en la idea, que remarcó el pasado martes en su visita a la redacción del diario INFORMACIÓN, que el vestuario del Elche está «comprometido y unido» ante la actual situación, si bien precisó que «otra cuestión es que las cosas no salgan en el campo, que los niveles de ansiedad sean mucho más altos de lo que necesitas para la competición y que el fútbol que tienes no fluya porque estás atenazado. Aquí estamos todos juntos sufriendo la situación».

El técnico confía en que una victoria pueda hacer cambiar de forma radical el ambiente en el equipo y en el entorno. «Estamos a un partido de cambiar el estado de ánimo de todos y de ver las cosas de forma diferente. Llevamos diciendo desde hace tiempo que tenemos que ganar un encuentro, pero no lo hacemos. La presión va en aumento y eso nos perjudica», explicó Parras antes de abogar por un cambio de planteamiento. «Estamos ahí, donde no queríamos estar. Ya no podemos tener miedo a caer, sino que hay que trabajar con la esperanza de salir».

«Todos somos conscientes de que nos hemos metido en una situación que se veía venir desde hace tiempo, esperábamos que con dos victorias todo se iba a solucionar, pero esas no han llegado. Pero no ha sido por falta de dejadez. No queda otra que no bajar los brazos y si hubiéramos ganado al Mirandés también estábamos obligados a ir a competir a Getafe», comentó el entrenador, quien dijo haber visto a su equipo en los últimos días «con otra chispita» en el aspecto físico, «con otra cosa que empieza a parecerse un poco más a lo que a mí me gustaría. Poco a poco vamos creciendo en este aspecto» y en el Coliseum Alfonso Pérez «no nos podemos dormir porque tras la presión y perdida, ellos se activan de forma muy rápida. Si pierdes balones en zona críticas, no perdonan».

Parras definió al Getafe, rival esta noche de su equipo, a partir de las 21 horas, como un conjunto «muy intenso» que exige a sus rivales un nivel muy alto de juego. Teme «sus muchas variables en su parte de ataque», pero dice tener «armas para poder sorprenderles y aprovechar los espacios que puedan dejar».

Considera vital que el equipo sepa entrar bien en el partido y se asiente bien desde el pitido inicial. «No nos podemos dejar avasallar y debemos ser conscientes de que son un equipo que te obliga a estar concentrado los noventa y tantos minutos que dura un partido», sentencia Parras.