El Elche se la juega esta noche (20 horas) frente al Almería en el Martínez Valero. Los ilicitanos deben sumar los tres puntos para escapar de la zona de descenso y evitar un final de Liga de alta tensión. Alberto Toril, técnico franjiverde, dice que no es una final el duelo ante el conjunto andaluz, aunque lo cierto es que la victoria permitiría mirar el futuro con otra cara, pero la derrota podría significar su adiós del banquillo y, lo que es peor, que el equipo se quedaría sin ningún margen más de error. En una situación de zozobra y sin rumbo. Ante el Almería no cabe otra cosa que ganar sí o sí. Todo lo demás es sinónimo de peligro y este equipo no está diseñado para vivir en el alambre las últimas jornadas de Liga.

Toril insistió ayer en su comparecencia ante los medios de comunicación que lo importante no es él, sino que el Elche continúe en Segunda División. Tiene toda la razón del mundo. Pero, no debe sorprenderle al andaluz estar en el punto de mira de todos porque los resultados no están siendo acordes al potencial que tiene este equipo.

No debe olvidar el preparador franjiverde que su equipo está en caída libre en las últimas jornadas y esos malos guarismos le han llevado a situarse a solo a tres puntos del descenso que marca, precisamente, el Almería, por lo que los puntos en juego de hoy parecen adquirir doble valor.

Toril se quejó ayer de que en los últimos encuentros no ha habido mucha gente en la grada animando al equipo, recordó las lesiones que ha tenido en la medular durante toda la campaña (Matilla, Mando, Dorca, Fabián o Pelayo) y afirmó que el mensaje negativo que se lanza desde la prensa sobre el equipo influye sobre la afición.

Lo único que ha desencantado a la grada en las últimas jornadas, que se hizo ilusiones tras el mercado de invierno, ha sido la trayectoria errática de un Elche que ha ido de más a menos.

Esconder las cartas

Toril decidió ayer no facilitar la convocatoria hasta esta mañana, ya que cuenta con varios jugadores con problemas físicos, entre ellos Fabián Ruiz y Guillermo. Ambos serán sometidos, en un entrenamiento suave que tendrá lugar hoy, a una última prueba para decidir si pueden entrar en el equipo.

Edu Albacar, baja en Valladolid por sanción, ocupará el lateral izquierdo de la defensa en lugar de Iriondo. Pelayo, que ya jugó en Valladolid, seguirá en el once, mientras que falta por saber si Fabián juega desde el inicio, al lado de Álex Fernández, en el doble pivote, o si el técnico apuesta por no arriesgar con el sevillano y vuelve a darle galones al canterano Caballero, que en su debut, desde el inicio, en Zorrilla, estuvo a buena altura. El resto de integrantes del once puede ser semejante al que jugó en Valladolid, con Hervías esperando su oportunidad en el banquillo.

Toril no podrá contar esta noche con los lesionados Pelegrín, Dorca, Eldin, ni con Matilla, baja de larga duración. Tampoco entra en el equipo Mandi, a pesar de contar con el alta, ya que le falta ritmo de competición, aunque podría estar en breve entre los elegidos.