La moral es lo último que se pierde. Eso es lo que piensan en el vestuario del Elche. Los futbolistas no se resignan a arrojar la toalla y a pesar de la decepción que significó el tropiezo frente al Alcorcón, todavía confían en poder alcanzar una plaza en la promoción de ascenso a Primera División.

Borja Valle dice que «no creo que sea un paso atrás. La virtud y el defecto de la Segunda División es que ganas dos partidos seguidos y estás ahí arriba y pierdes dos y estás muy mal». Valle asegura que todavía «puede pasar cualquier cosa», y considera que si son capaces de vencer el viernes (20 horas), en Tarragona, al Nàstic, y luego ganar, en el Martínez Valero al Zaragoza, «la cosa cambia».

El futbolista cedido por el Deportivo de la Coruña afirma que el empate «al final es un punto y todo suma y acerca al objetivo». El mediapunta recuerda que el conjunto ilicitano ya pasó por una situación similar antes de viajar a Lugo. «Fuimos con malas sensaciones, ganamos y pensamos en pelear por la promoción. La fe hay que tenerla siempre y trabajar para ello», a la vez que apela por «sacar lo positivo» del choque frente a los madrileños.

A Valle no le extraña la imagen tan diferente que mostró el Elche ante el Levante y frente al Alcorcón. «En Segunda da igual que estés arriba o abajo porque todos los equipos luchan y juegan».

Iriondo

Por su parte, Iriondo se muestra en términos similares a Borja Valle. «El empate no es un mal resultado. Es un punto, aunque es verdad que jugábamos en casa.

El lateral izquierdo franjiverde recuerda que «todavía queda mucho, la historia puede cambiar en cualquier momento. Ganas dos partidos y entras en dinámica positiva».