El Elche tiene por delante un mes complicado en los despachos. Está a la espera de que el juez haga oficial la aprobación del convenio de acreedores, además de la calificación del crédito con Bruselas y el conflicto con Petxina. Entre medio, trata de sentarse a una misma mesa con la Generalitat para tratar de ir de la mano en todos los asuntos que rodean al club. Se van a vivir días intentos en el que está en juego el futuro de la entidad franjiverde.