La cara de Alberto Toril, al final del encuentro, era un poema. El técnico del Elche volvió a ver una película que se está repitiendo en demasiadas ocasiones. «Esto ya nos ha pasado. Veníamos de una buena dinámica, tras empatar en Vallecas y ganar al Girona. Teníamos el partido controlado y, otra vez, lo hemos tirado en dos acciones puntuales», lamentó.

El preparador franjiverde no encuentra ni explicación ni remedio. «Es complicado. Uno trata de entrar en la cabeza de los futbolistas, hacer hincapié para que no ocurran esos errores, pero, en esta categoría, los pequeños detalles deciden. El primer gol se ve en alevines, uno no despeja, otro jugador se cae...lamentablemente nos está sucediendo mucho».

A pesar de ello, Toril quiere ver el lado positivo de las cosas. «No sólo me quedo con los errores. Hay que analizar el global del encuentro y hemos hecho muchas cosas buenas. En el primer tiempo, sabíamos que el Tenerife iba a salir a apretar y dominar y el plan era controlar el partido para en el segundo tiempo, sacar a Pablo Hervías y a Borja Valle e intentar cambiar. Ese era el plan, pero los errores nos han condenado».

El entrenador del conjunto ilicitano explicó los motivos que le llevaron a cambiar en el descanso el sistema de tres centrales por la habitual defensa de cuatro. «Josete llevaba una tarjeta amarilla y queríamos poner defensa de cuatro para sacar a Borja Valle y a Hervías, que salían de lesiones y no estaban físicamente para jugar el partido entero. En el primer tiempo sabíamos que ellos iban a jugar mucho por el interior y queríamos madurar el partido para luego ir a por ellos, pero esas desgracias, que han provocado los dos goles, no nos lo han permitido».

Alberto Toril reconoce que la derrota es «un paso atrás», pero todavía no arroja la toalla para intentar llegar al play off de ascenso. «La Liga es muy larga y, al final, volveremos a estar cerca. Sé que es un tópico, pero debemos ir, poco a poco, acercándonos a la parte de arriba. Tenemos que intentar no cometer los errores que cometemos, porque nos están penalizando mucho».

Por último, el técnico del Elche mandó un mensaje a la afición: «A la gente sólo le podemos decir que no vamos a bajar los brazos, estamos a seis o siete puntos, son dos partidos, estamos todos pegados en la clasificación y queda todavía mucha competición».