La Junta General de Accionistas del Elche, que se celebra esta tarde (19 horas), en la sala de Prensa del estadio Martínez Valero, se presenta como la más plácida de los últimos años. El hecho de que la entidad franjiverde se encuentre inmersa en concurso de acreedores deja poco margen de maniobra y, además, todas las cuentas están supervisadas por el administrador concursal, Carlos Pérez Pomares.

Además, la asociación «Regeneración ECF» y la plataforma «Salvemos al Elche», que han venido ejerciendo de fiscalizadores de los actuales dirigentes, no tienen previsto formular preguntas como colectivo y sólo algunos de sus miembros, a título personal, serán los que cuestionen sobre algunas dudas del funcionamiento del club ilicitano. Recordamos que en la última junta de accionistas en la que se eligió el consejo de administración, tanto «Regeneración» como «Salvemos al Elche» recibieron la sindicación de acciones por parte de más de 4.000 pequeños accionistas, pero poco pudieron hacer ante la mayoría de los títulos que ostentan los dirigentes que, además, cuentan con la sindicación de las acciones del expresidente José Sepulcre, que es el máximo accionista individual.

En la asamblea de esta tarde se aprobará un déficit de 2,2 millones correspondiente al ejercicio 2015-2016 que ha venido motivado por la provisión de un gasto de 4,1 millones por si, finalmente, hay que pagar la multa de la Unión Europea. El Elche espera presentar a sus accionistas un superavit de 1,9 millones, pero la obligación de provisionar un dinero para pagar la multa, a pesar de estar recurrida, se lo ha impedido.

Por otro lado, el presupuesto para la presente temporada 2016-2017 asciende a 10,9 millones, de los que la mayoría corresponden a los gastos de personal, que asciende a 6.559.000 euros. La primera plantilla, el cuerpo técnico y la comisión deportiva se lleva 4.274.000 euros, el fútbol base 710.000 y el personal no deportivo 550.000. En el apartado de gastos también figuran 1.025.000 euros de Seguridad Social, 390 de material deportivo, 1.560.000 de servicios exteriores, 425.000 de desplazamientos y 620.000 euros de otros gastos.

En el capítulo de ingresos, la entidad franjiverde ha establecido 6.490.000 derivados de los derechos de televisión, 2.116.000 de publicidad y arrendamientos y 1.712.000 en abonos y taquillas. A esta cifras hay que añadir los 850.000 correspondientes al primer pago del traspaso de Sergio León a Osasuna. Por lo que si las cuentas salen como están previstas se podría obtener beneficios a final de campaña.