El Elche dio una lección de solidaridad y trabajo en Reus y se trajo los tres puntos tras imponerse al equipo catalán por 0-1. Una diana de Guillermo fue el mejor regalo de Navidad que podía tener el equipo ilicitano. Una espectacular manera de despedir el año en un campo en el que la lluvia que cayó durante todo el partido, en algunos momentos de manera torrencial, no invitaba a las florituras. El Elche supo bajar a la mina, ponerse el buzo de trabajo y al final tuvo la recompensa. Nadie se escondió, los 14 futbolistas que estuvieron en el campo arrimaron el hombro y, Alberto Toril, acertó de pleno en el planteamiento del partido. Puso músculo en el campo, para los momentos en los que había que aplacar el empuje del rival, pero también valentía arriba para hacer daño cuando el balón fuera propiedad de los ilicitanos. Esa combinación resultó mágica.

Y entre tanto obrero para la causa destacar a Liberto. El castellonense recordó a Gene Kelly bailando bajo la lluvia, en la película del musical de Hollywood titulada «Cantando bajo la lluvia». El fue el encargado de ofrecernos una melodía, más típica de Broadway, en una jugada espectacular que culminó Guillermo empujando el balón a la red. Su cambio de ritmo resultó espectacular, semejante, sin querer caer en el sacrilegio, a los de Johan Cruyff en sus buenos tiempos en el Ajax o el FC Barcelona. Este chico tiene fantasía y ayer lo demostró bailando bajo de la lluvia del Estadi Municipal de Reus. Tiene algo que el resto ni se imagina. Cuando fue sustituido, en el minuto 64, por Iriondo, ya no podía ni con su alma. No sólo se limitó a dar pinceladas de su calidad, sino que también, como el resto de compañeros, lo dejó todo en cada balón que disputó. No podía esconderse nadie del equipo y él tampoco lo hizo.

La noche de perros que se vivió en el Estadi Municipal de Reus invitaba a tirar de músculo. Alberto Toril decidió dejar a Álex Fernández en el banquillo y puso en la medular a Pelayo junto a Dorca. Primer acierto del cordobés.

Además, Rober jugó por Luis Pérez, mientras que Liberto debutó desde el inicio en lugar del lesionado Pedro. Arriba, manutuvo a Nino y Guillermo. Segundo acierto en su pizarra.

Había que ser solidario en el campo y el Elche lo fue durante los primeros 45 minutos de partido. El terreno de juego no invitaba a florituras y había que luchar cada balón como si fuera el último y tener al Reus lo más lejos posible del área de Juan Carlos. Nadie bajó los brazos, el dúo Pelayo-Dorca puso el equilibrio, y todos mostraron esa versión de un equipo luchador y peleón, que no se asusta ni ante las inclemencias del campo, ni tampoco ante un rival armado y que concede poco en su área. Sus 14 goles en contra le avalaban.

Tras el descanso, el Elche salió mucho más enchufado, y, en el minuto 46, Nino sirvió sobre Liberto, el chaval voló por su banda y le puso el balón a Guillermo para que firmara su cuarto gol en la Liga.

Con el 0-1 el Elche tiró de oficio, nunca bajó los brazos y siguió trabajando duro. Toril, tercer acierto de la noche, supo ir oxigenando al equipo con los cambios. Iriondo salió por Liberto, luego, José Ángel puso templanza en la medular cuando saltó al césped por Nino, y, Álex Fernández, en el tiempo añadido, salió para provocar que el partido ya muriera sin que el marcador sufriera variaciones.

El Reus achuchó, con más corazón que cabeza, en los minutos finales, pero el Elche supo defenderse con orden y el rival nunca dio la sensación de que podía ni siquiera igualar la contienda. Ahora, de vacaciones, hasta el 27 de diciembre.

Quinta cartulina de Albacar

El lateral Albacar no podrá comenzar el año jugando y se perderá el primer partido de 2017 por sanción. Ayer vio su quinta cartulina y será baja ante el Cádiz.