La firma ilicitana Kelme seguirá vistiendo al Elche la dos próximas temporadas. Donde dije Hummel, digo Kelme. El consejo de administración del club franjiverde negoció inicialmente con Joma, Adidas, Kelme, Umbro y Hummel. Seguidamente, tras valorar lo que ofrecían todas ellas, decidió que las finalistas era las dos últimas. Tras hablar con los representantes de ambas marcas se optó por la firma danesa, que tiene su sede en el Polígono Industrial de Torrellano.

Con Hummel sobre la mesa como elegida para sustituir a Kelme, que llevaba tres campañas vistiendo al Elche CF, llegó la firma de la «garra» confirmando que estaba dispuesta a utilizar la cláusula de su contrato, que en su día firmó con la entidad franjiverde, por la que podía optar al derecho de tanteo, una vez el club se hubiera decantado por una de las empresas que había pujado en la subasta. Kelme ha decidido dar el paso adelante y ha comunicado al club ilicitano que seguirá siendo la marca oficial las dos próximas campañas en las mismas condiciones que aportaba Hummel.

La entidad franjiverde agradece el deseo de las distintas empresas en vestir al Elche y entiende que la continuidad de Kelme es una buena noticia, ya que, como empresa ilicitana, está en su derecho de verse representada en el club de su ciudad y ojalá hubiera muchas firmas que así lo entendieran. El contrato renovación de la vinculación del Elche con Kelme lo están elaborando los abogados y antes del martes se quiere hacer oficial.

Palco y unos seguidores fieles

Diego García, presidente del club ilicitano, estuvo, ayer, en el palco del Estadi Municipal de Reus para presenciar el encuentro en la localidad tarraconense. También acudió el director deportivo José Luis «Chuti» Molina.

A pesar de que no se pudo completar el autobús de seguidores, un grupo de aficionados desafiaron al tiempo y una noche infernal para estar en la grada animando a su equipo. Ya, antes de comenzar el encuentro, cayó una tremenda tromba de agua sobre el campo y ellos estaban en la grada sin ningún tipo de protección. Eso se llama amor a los colores.