Rober Correa dio el susto en el entrenamiento matinal que el Elche llevó a cabo ayer. Durante la segunda parte de la sesión, en el transcurso de un partidillo, el lateral derecho recibió un golpe en una pugna por un balón con Pablo Hervías y quedó tirado en el césped.

Tras ser atendido por el doctor César Quesada, el futbolista catalán no pudo continuar y se retiró a los vestuarios, cojeando y con sensibles muestras de dolor, acompañado de los fisioterapeutas David Abad y José María García «Milito».

Tras acabar el entrenamiento, el jefe de los Servicios Médicos del club ilicitano le realizó una exploración y todo apunta a un esguince en el tobillo de su pierna derecha. Correa fue mejorando con el paso del tiempo y pudo abandonar los vestuarios por su propio pie con un vendaje.

En principio, parece que se trata de una lesión leve y el jugador franjiverde espera recuperarse a tiempo para el encuentro del sábado frente al Lugo. Todo va a depender de cómo evolucione su tobillo y hoy jueves ya se podrá dar un diagnóstico más concreto para disipar las dudas sobre si puede estar óptimo para jugar o no.

Dos encuentros en cinco días

No obstante, el cuerpo técnico no va arriesgar porque el Elche recibe al conjunto gallego el sábado y el próximo miércoles 21 de septiembre hay, de nuevo, jornada de Liga y los ilicitanos tienen que viajar a Huesca.

Rober Correa está siendo hasta ahora un jugador imprescindible para Alberto Toril. El futbolista del Espanyol ha sido titular en los cuatro partidos disputados de Liga y es, junto al portero Juan Carlos, el central Pelegrín y el mediocentro Dorca, el único jugador de la plantilla que ha disputado todos los minutos ligueros.

Además, el lateral derecho franjiverde es uno de los futbolistas que mejor rendimiento está dando en este arranque de temporada.

El jugador catalán sólo se ha perdido el encuentro de la Copa del Rey en Miranda de Ebro, en el que el entrenador decidió darle descanso y apostar por el joven Luis Pérez.

Toril trabaja el ataque posicional

Alberto Toril quiere seguir implantando su sistema de juego de dominar mucho la pelota y llevar el control del juego.

Para ello, ayer, durante el partidillo de entrenamiento, trabajó el ataque posicional ante una defensa férrea. El técnico alineó en un equipo a los denominados «jugones», con Matilla y Álex Fernández iniciando el juego y los extremos Pedro y Pablo Hervías muy abiertos en las bandas.

En el encuentro del sábado se darán cita dos conjuntos con similares características y que apuestan por el buen trato del balón. Toril está intentando inculcar esa idea en el juego del Elche, mientras que Luis César Sampedro está continuando con el legado que dejó Luis Milla en el Lugo, quien, también, apostó porque su equipo tratara de llevar la iniciativa sin buscar los pelotazos hacia los delanteros.

Por ello, será un partido en el que ambos equipos lucharán por dominar la pelota, aunque el conjunto ilicitano, al jugar en casa, deberá tener más la posesión del esférico.