La afición del Elche no está respondiendo como se esperaba. El sueño del secretario general, Juan Pascual, quien el pasado 6 de julio, cuando presentó la campaña de abonos, dijo que el objetivo era repetir los 12.000 abonados del año pasado, no se va a cumplir ni de lejos, a pesar de que los empleados del club diseñaron una campaña atractiva y con una rebaja importante de los precios.

A falta de una semana para el comienzo de la competición -los franjiverdes se estrenan el próximo sábado (19 horas) en el Martínez Valero contra el Rayo Vallecano- según los datos oficiales facilitados por el club, sólo 5.813 seguidores han retirado su carné. Una cifra muy por debajo de lo deseado.

Una amplia mayoría de la afición ya anunció, a través de las redes sociales, que, mientras continúe el actual consejo de administración, no estaban dispuesta a comprar su abono. Y muchos de ellos lo hacía con mucho dolor de corazón porque han sido abonados durante toda su vida.

Los malos números de venta podrían haber sido peor. Durante los primeros 25 días de la campaña de abonos apenas se vendieron 3.042 carnés. El 6 de agosto finalizaba el plazo para mantener el asiento y el día antes el director del Instituto Valenciano de Finanzas, Manuel Illueca, anunciaba la venta del crédito impagado por la Fundación a Skyline International. Esa noticia animó un poco a la afición y en apenas 6 días se han hecho 2.270 abonados, es decir casi la mitad de la totalidad.

El rechazo a la actual directiva está influyendo de manera decisiva en el fracaso de la campaña y sólo la salida de los actuales consejeros podría dar un espaldarazo al ánimo de los seguidores, que están hartos de la manera de gestionar el club.

Mientras tanto, con los datos negativos de venta, desde el departamento de marketing recuerdan que las fiestas de la ciudad también retrasan la venta y esperan que de aquí al comienzo de la Liga y hasta finales de agosto se puedan hacer unos 2.000 abonados más y poder llegar a los 8.000, que seguiría siendo una cantidad discreta, muy lejos del objetivo, pero que se asemejaría a otras malas temporadas.

Gradas vacías

Otro dato de la poca ilusión que hay entre la afición fue la asistencia el pasado viernes al Martínez Valero para presenciar el encuentro del trofeo «Festa d'Elx» contra el Al Rayyan de Catar. Tan sólo 2.736 espectadores (datos oficiales) acudieron al partido. Muchos clásicos seguidores que nunca fallan aseguran que ha sido la entrada más floja del torneo y que ni en los tiempos de Segunda División B iba tan poca gente. Y eso que era el primer partido de los franjiverde ante sus aficionados.

Toril pide apoyo

Mientras tanto, el entrenador del Elche, Alberto Toril, pidió el apoyo de la afición después del encuentro frente a los catarís. «Estamos en una situación en la que necesitamos el apoyo de todo el mundo y creo que es el momento de ayudar, independientemente de como esté el equipo. Lógicamente cuanto mejor estemos la gente se animará más. Pero la afición debe ayudar porque vaticino un buen año».

Quedan seis días para que arranque la Liga y si no cambian muchos las cosas todo hace indicar que el próximo sábado el coliseo franjiverde presentará una pobre entrada en el pistoletazo de salida ante el Rayo Vallecano.

El club tiene previsto intensificar esta semana la campaña para tratar de cambiar la opinión de buena parte de la afición y vender más abonos en los días previos al estreno liguero.