Diego García, presidente del Elche, aseguró ayer que siguen trabajando como si no ocurriera nada en la entidad ilicitana al entender que «el club no se puede parar». El dirigente avisa de que «vamos a seguir presentando jugadores y a poner en marcha la campaña de abonos. Si luego aparece un inversor que cumpla las expectativas del Elche, no pondremos ningún tipo de problema. El peor favor que le podríamos hacer al que llegue es encontrar una empresa parada. Ningún jugador está poniendo pegas a este club porque saben que si no estamos nosotros vendrán otros». J. P.