El delantero franjiverde Álvaro Giménez acaba contrato el 30 de junio, pero no tiene la sensación de que el del sábado en Alcorcón «sea mi último partido» como jugador del Elche. Afirma que «todavía no he hablado nada sobre mi futuro, a día de hoy pertenezco al Elche y por qué no seguir mucho tiempo más aquí». El único jugador ilicitano de la plantilla franjiverde y, junto a José Ángel, superviviente del Elche descendido de Primera en los despachos, explica que «en el club me han dicho que a partir de la semana que viene hablaremos sobre el futuro». Álvaro ha sido fijo en los esquemas de Rubén Baraja y, de hecho, ha sumado 2.878 minutos en 38 partidos. «Estoy contento de cómo me ha salido la temporada, he jugado muchos encuentros después de tres años sin hacerlo con constancia. Mi trabajo ahí está. Estoy muy contento con mi rendimiento y con el técnico, que siempre ha confiado», apuntaba antes de reconocer que le queda «el sabor amargo de no haber sido capaz de aportar más goles al equipo. La racha, de la que hablan los goleadores, no me ha llegado».

En el último partido ante Valladolid, cuando fue sustituido recibió aplausos, pero también pitos. Álvaro es consciente de que «uno no puede gustar a todo el mundo» y aunque «no le encuentro explicación, ya que al ser de casa debería ser al revés. La gente tiene su opinión y lo acepto».

Álvaro Giménez asume finalmente que el sábado, en Alcorcón, van a salir «a sumar los tres puntos y tratar de que Sergio León sea el pichichi de la categoría». Elogia a su compañero que «todas las que tiene las mete y ha hecho una gran temporada», pero tiene claro que «ha sido un trabajo de todo el equipo».