La jornada de este fin de semana no ha sido del todo mala para Elche. La derrota en Córdoba parecía que podía significar el adiós a la promoción de ascenso, que se podía haber alejado a seis puntos si el Oviedo hubiese ganado en Almería. Pero el conjunto asturiano cayó (3-1), en el estadio Juegos del Mediterráneo, y ha salido de los puestos de privilegio, en los que ha estado, prácticamente, toda la temporada.

Ahora, a falta de tres jornadas para finalizar la Liga regular, el Alavés (68 puntos) es el único que tiene asegurada plaza en el play off y, con su triunfo ayer, frente a la Ponferradina, parece que ha puesto la directa hacia la Primera División y tiene todo en su mano para ser uno de los equipos que ascienda directamente.

El Leganés (65), que parecía que lo tenía en la mano, también, se ha complicado subir directamente después de su tropiezo en casa frente al Huesca (2-3). Con este resultado, el Nàstic, que dio la sorpresa y venció en Zaragoza (0-1), en un encuentro polémico, también tiene posibilidades de terminar entre los dos primeros.

A partir de ahí, todo puede pasar porque desde el Elche, que décimo (56 puntos) hasta Osasuna, que ayer remontó (3-2), tras ir perdiendo con el Numancia, hay cinco puntos de diferencia a falta de nueve por disputarse. El Zaragoza (60) y el Girona (59), que ha reaccionado y se ha metido en la zona privilegio en las dos últimas semanas, completan los equipos que están, ahora mismo, en promoción de ascenso.

El Oviedo (59) ha salido fuera y, además, en la próxima jornada se juega la vida, en el Carlos Tartiere, frente al Leganés, segundo clasificado. Además, en el penúltimo encuentro visita al Zaragoza.

Alcorcón (58) y Córdoba (58) también se han metido de lleno en la lucha por disputar las eliminatorias por el ascenso.

En la penúltima jornada hay otro enfrentamiento directo entre el Alcorcón y el Girona, mientras que en la última será el Elche quien visite al conjunto madrileño.

La posibilidades de finalizar la Liga entre los seis primeros clasificados para los ilicitanos está complicada, pero no imposible, porque parece que esta temporada ningún equipo quiera subir y la mayoría está tropezando más de lo que es habitual entre los conjuntos de la zona noble de la clasificación.

Lo que está claro es que el Elche no tiene margen de error y es más que probable que tenga que sumar los nueve puntos que restan si quiere alcanzar el sueño de la promoción de ascenso.

El primer paso es mañana en Mallorca, aunque el equipo balear tampoco puede fallar porque se juega la permanencia.

Pero si el cuadro de Rubén Baraja es capaz de vencer en las Islas Baleares, en la penúltima jornada recibe al Valladolid que no se juega nada, por lo que un triunfo en el Martínez Valero le podría dar la opción de jugarse la temporada en el último partido en el campo del Alcorcón.

Cosas más complicadas se han visto, pero, para ello, el Elche tiene que romper la racha de los últimos cinco encuentros en los que ha sumado cuatro empates y la derrota del pasado sábado en Córdoba. Además, buena parte de las posibilidades franjiverdes pasan porque Sergio León, que lleva cinco jornadas sin marcar - las mismas que el Elche sin ganar- recupere el olfato goleador.