El Elche tiene por delante doce partidos para intentar meter la cabeza en la promoción de ascenso a Primera División. A pesar de que le está costando ganar en casa, delante de su afición, lleva cuatro partidos sin hacerlo, los ilicitanos prácticamente tienen la permanencia en el bolsillo, mientras que el play off está a tiro de dos puntos. Cuando se llegue a los 50 puntos el equipo comenzará a mirar para arriba. Mientras, prefiere ir partido a partido.

Al resto de rivales también les está costando ganar más de la cuenta y, de hecho, en la última jornada sólo el Nàstic de Tarragona, de los siete primeros clasificados, ganó su encuentro. La igualdad es máxima y en los doce partidos que restan hasta el final de la competición todo puede suceder.

Los distintos clubes están más interesados en no recibir goles y evitar los errores que en ir hacia la meta contraria y los guarismos así lo denotan. El miedo a perder es la tónica dominante en la Liga Adelante y se sale inicialmente a asegurar el empate, sin arriesgar más de la cuenta.

El entrenador del Real Zaragoza, Lluis Carrera, confesó en la última jornada, al final del partido en el Heliodoro Rodríguez López, donde su equipo no pasó del empate a cero, de que el CD Tenerife y otros equipos, como «el Elche o el Real Valladolid, van de menos a más» y, si siguen con sus dinámicas actuales, se meterán en la zona de arriba, donde habrá «un lío tremendo» por los puestos de privilegio de la clasificación.

La verdad es que el preparador catalán tiene mucha razón porque en muy pocos puntos hay un gran número de equipos y los que mejor manejen la presión lograrán meterse en al zona de privilegio. Dos conseguirán el ascenso directo a la máxima categoría y los otros cuatro pugnarán por un puesto en la promoción de ascenso.

Entre todos ellos, el Elche puede ser uno de los beneficiados, ya que en el momento que llegue a los 50 puntos que permiten seguir un año más en la Liga Adelante, la tarea estará realizada y todo lo que venga después será un premio. De ahí, que la presión jugará a su favor y en contra de otros rivales como Zaragoza, Córdoba, Valladolid u Oviedo se diseñaron para dar el salto a Primera, o de otros, como Leganés o Alavés, que llevan mucho tiempo en la parte alta de la tabla y cada punto que pierden significa que se les escapa un premio que ya tenían en el bolsillo.

Los ilicitanos llevan, en estos momentos, un punto menos que en la primera vuelta, 13, y están capacitados para mejorar sus números si futbolistas como Eldin, que sale de una lesión muscular, o Espinosa e Ilie, vuelven a tener el nivel futbolístico que mostraron en el arranque liguero. El margen de mejora del equipo es muy grande y sólo falta que Baraja y los suyos sean un poco más ambiciosos en sus planteamientos.

A río revuelto

En ese río revuelto, el Elche debe ser capaz de dar el paso adelante y luchar por meter la cabeza en la promoción.

El calendario del equipo de Baraja ahora se complica y debe medirse a tres equipos que están por delante en la tabla. Los franjiverdes visitan el sábado al líder Leganés, que ha sumado uno de los últimos seis puntos en litigio. Luego, reciben al Zaragoza y se desplazan a Pamplona para enfrentarse a Osasuna. Seguidamente, el Lugo pasa por el Martínez Valero y habrá que visitar, a continuación, al Alavés. A partir de ahí, en casa recibirán a Albacete, Girona y Valladolid. Viajarán a los campos de Tenerife, Córdoba, Mallorca y Alcorcón. Doce auténticas finales y un sueño: el play off de ascenso.