El centrocampista franjiverde Álex Felip, uno de los refuerzos del Elche CF en el mercado de invierno, confesó ayer, tras el entrenamiento matinal, que la victoria ante el Mirandés en Anduva significó un «golpe de ánimo increíble, después de cinco jornadas sin conocer la victoria, y más por cómo vino».

Álex Felip solo ha participado en dos partidos desde su inscripción con el equipo, ambos en el tramo final de los encuentros ante Alcorcón y Mirandés, con la intención de cerrar ambos duelos, aunque el centrocampista se mostró satisfecho con su aportación al equipo. «El técnico me pidió en los últimos minutos mantener el orden para que el encuentro no se escapara», recuerda

«Me merezco jugar lo que me dice el entrenador y cuando me dé minutos intentaré aprovecharlos lo máximo posible. Querría jugar más, pero estoy para aportar al equipo y, a partir de ahí, seguir creciendo y sumando», argumenta al ser preguntado por los pocos minutos que está interviniendo.

«Me siento capacitado para todo lo que me manda el técnico, me considero un jugador importante en el equipo y solo me queda seguir trabajando para que en lugar de que me dé quince minutos, me dé treinta», apostilló el centrocampista castellonense.

Al ser espetado por las posibilidades de ascenso del Elche a Primera, recordó que el pasado verano se hablaba en el entorno del club de «formar un equipo para salvar la categoría. Cuando lleguemos a los cincuenta puntos veremos qué pasa», insistió, fiel al mensaje que sale un día sí y al otro también desde el vestuario.

Felip reconoció que a su compañero Sergio León, máximo realizador de Segunda División con 17 tantos, se le queda pequeña la categoría. «No sé si es el mejor jugador de Segunda División, pero a nosotros nos da la vida. Cuando la tiene va para adentro y su trabajo de cara al gol es espectacular. Ya veremos el año que viene dónde está, pero entiendo que la Liga Adelante se le queda pequeña».