No está siendo fácil para José Ángel su regreso a los terrenos de juego después de pasar por el quirófano para poner en condiciones su rodilla derecha. Se lesionó de gravedad al final de la pasada campaña y le tocó recuperarse durante más de seis meses. Su reaparición frente al Alcorcón terminó con una rotura muscular. El domingo, Baraja volvió a contar con el como titular en el puesto de central y, como él reconoce, «no fue mi mejor partido».

¿Cómo valora el partido disputado por el Elche en el Carlos Tartiere ante el Oviedo?

Después de una derrota no podemos irnos contentos. Trabajamos y luchamos hasta el final, pero el Oviedo supo aprovechar nuestros errores, sobre todo al final del partido, para quedarse con los tres puntos. Pienso que el resultado fue demasiado abultado para lo que vimos en el terreno de juego.

¿Qué le faltó al equipo para conseguir un resultado positivo?

Nos faltó algo de acierto. Durante la segunda parte tuvimos controlada la situación, dispusimos de varias ocasiones, sobre todo al contragolpe, pero no estuvimos finos en los últimos metros. Ellos sí lo estuvieron, gracias a nuestros errores, y ahí se decantó el partido de su lado. Creo que merecimos un mejor resultado.

¿Su gol en propia puerta en el coliseo astur debió anularse por estar Koné en fuera de juego?

Fue un centro lateral que intento despejar, no llego bien y con la puntera meto el balón dentro de la portería. Koné estaba en fuera de juego, el árbitro no lo vio así y tenemos que aceptar su decisión. Me molesta el jugador del Oviedo. Si él no hubiera estado allí yo no me lanzo a por la pelota o la dejo para el portero. Pienso que interviene, me molesta y la verdad es que condiciona la jugada.

¿Cómo se vio en su vuelta a los terrenos de juego?

Personalmente no fue uno de mis mejores partidos. La verdad es que nos enfrentamos a un rival que busca de forma repetida las espaldas, en un campo muy duro y difícil. No me encontré cómodo en ningún momento, aunque estoy contento porque pude acabar el partido entero, que hace mucho tiempo que no lo hacía.

Dos partidos ha jugado en esta Liga, ante Alcorcón y Oviedo, ambos duelos han sido de mucha exigencia física para un jugador que viene de una grave lesión...

El entrenador es el que decide cuándo juegas y hay que estar preparado para ello y dar la cara. Uno trabaja duro durante la semana para que cuando el técnico decide ponerte estar al nivel de tus compañeros. El terreno estaba pesado y la verdad es que no ayudaba para las piernas. De hecho, terminé con los gemelos cargados. Las situaciones vienen así y hay que adaptarse a ellas. No cabe otra.

¿Piensa que las opciones del ascenso se están esfumando?

Lo que buscamos desde el primer partido de Liga es lograr la permanencia en Segunda División. Éste es objetivo que todos tenemos en la cabeza. Cuando lleguemos a los 50 puntos ya veremos donde estamos para ver si aspiramos a algo más. En estos momentos, hay que pensar en el próximo partido, en ganar al Llagostera.