La Fundación del Elche Club de Fútbol tiene esta tarde, a partir de las seis, una reunión en la que sus nueve patronos se encuentran en una difícil encrucijada. El patronato, que tiene sindicada el 54% de las acciones que posee el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), debe decir si hace caso a la exigencia del organismo autonómico o apoya la propuesta del consejo de administración, que pretende una ampliación de capital de 1,36 millones para poder convertir en títulos las aportaciones que realizaron los empresarios y aficionados en julio.
El IVF ha dejado claro que no está dispuesto a esa ampliación para no perder el 54% del capital social de la entidad que lo convierte en máximo accionista y ha avisado de que, en caso de los miembros de la Fundación no hagan caso de su exigencia, pedirá responsabilidades.
Un situación que pone entre la espada y la pared a los patronos, dándose la circunstancia de que algunos de ellos, como Jaime Oliver, Paco Sánchez y Juan Contreras son, a la vez, consejeros del club y han dado el visto bueno a la ampliación. Junto a ellos tres, el resto del patronato está formado por el presidente, Juan Serrano; la concejala de Deportes, Cristina Martínez; el exsecretario general, Antonio Rocamora; y Toño García Hita, Anselmo Navarro y Vicente Abadía. También pertenecían al patronato Vicente Javaloyes y Juan Irles, pero dimitieron.
Parece poco probable que la Fundación se atreva a llevar la contraria a las exigencias del IVF, pero el actual secretario general, Juan Pascual, avisó ayer de que son los patronos los que tienen que tomar la decisión. Pascual aseguró que ha firmado su renuncia como consejero y que todavía no ha rubricado su firma en su nuevo contrato como secretario general. Cuando se le preguntó entonces qué función desempeñaba en el club dijo: «Soy un cooperante».
