El Elche regresa el domingo a Bilbao para volverse a medir al filial del Athletic Club, equipo con el que no compite en la capital vizcaína desde el 9 de junio de 1991. Aquel día, de infausto recuerdo, los dirigidos por el técnico argentino Gustavo Silva cayeron derrotados por 3-0 ante los «cachorros» del conjunto vasco y descendieron a Segunda División B. Una jornada negra dentro del blanquiverdismo que dio paso a unos años muy duros en los que la desaparición del club ilicitano estuvo en un tris de producirse.
El Elche no había militado más abajo de la categoría de plata desde la campaña 57-58 y aquella derrota lo volvió a situar en las verdaderas catacumbas del fútbol español. Resultó muy duro aquel descenso y muchos todavían no lo han olvidado.
El viejo San Mamés dejó un mal sabor de boca del que el Elche no podrá nunca resarcirse porque logró el ascenso justo el año en el que se ha derribado el coliseo rojiblanco y se ha construido el nuevo.
En aquel partido del descenso jugaron Miguel, Murúa, Bellido, Chema, Robi; Andone (Gomis), Puche I, Guina, Capón; Cepeda (José Ramón II) y Crespín. Una plantilla que se hizo para regresar a Primera División terminó con el Elche en Segunda B. Los goles del equipo vasco fueron obra de Larrazabal, Uribarrena y Cuéllar. Hasta Crespín falló un penalti. El Bilbao Athletic lo dirigía el mítico Fidel Uriarte y contaba en sus filas con los actuales técnicos Javi Gracia y Asier Garitano, además de con Eskurda, Cuéllar o el meta Kike. «Tenían un equipazo», recuerda José Ramón II, presente en aquel partido y metido ahora a labores de comentarista de los partidos del equipo ilicitano en Cope Elche. A su juicio, «con el partido ante el Leganés, aquel fue el encuentro que más me marcó. Fue muy duro ver caer así al equipo a Segunda B». José Ramón recuerda que «salí sustituyendo a Cepeda en la segunda parte y me puso en el campo Pedro Pablo, un compañero, ya que el técnico era incapaz de reaccionar. Luego, cuando llegamos a Elche le habían pinchado las cuatro ruedas de su coche». El central Chema también confiesa que «fueron días muy duros». Señala que «el meneo que nos dieron fue tremendo. Yo soy del Athletic desde niño y jugar en San Mamés ma atraía. Me dejó un mal de sabor de boca. Además, unos días más tarde debía operarme de pubis».
El regreso a «El bocho»
A finales de octubre de 2013, el Elche regresó a «El bocho», para medirse en Primera División al primer equipo vizcaíno en el nuevo San Mamés. Logró un meritorio empate a dos goles. En su segunda campaña en la máxima categoría volvió a Bilbao y profanó «La Catedral» logrando la victoria por primera vez en su historia.
