El presidente del Elche, Juan Serrano, anunció ayer el nombramiento del hasta ahora consejero delegado, Juan Pascual, como nuevo secretario general del club ilicitano, con un sueldo que tanto Pascual como el máximo mandatario se negaron a desvelar. Una designación que, aún esperada, ha causado cierta sorpresa y disparidad de criterios en el consejo de administración porque Serrano había manifestado en más de una ocasión que lo que quería era gente que trabajase por y para el Elche sin ningún beneficio personal.
El rostro del presidente delataba que estaba pasando un mal momento en el anuncio del nuevo cargo. «En la reunión del Consejo de Administración se acordó pedir a Juan Pascual que desempeñase funciones de secretario general y, al mismo tiempo, que renunciase a su cargo como consejero del club. Sus funciones serán las mismas que está desarrollando hasta ahora».
Cuando se le preguntó a Juan Serrano si el puesto era remunerado su respuesta fue afirmativa y argumentó que «el consejo entendía que es una persona que está trabajando en el club ocho horas todos los días y debía estar remunerado. Juan Pascual está haciendo una buena labor y estamos muy agradecidos». El máximo dirigente declinó hacer público el sueldo del nuevo secretario general. «Es una cuestión interna del consejo».
El presidente también se negó a explicar si el nombramiento de Pascual había sido por unanimidad dentro del consejo de administración. «Es una decisión del consejo y ya está».
Por su parte, el nuevo hombre fuerte de la entidad franjiverde también se negó a desvelar la remuneración que va a percibir. «Es un asunto privado, un tema personal». Y cuando se le insistió en que si no lo decía ahora, lo tendría que hacer en la próxima junta de accionistas del próximo 16 de febrero señaló: «Entonces el consejo decidirá y si lo tengo que hacer, ya lo haré».
La designación de Juan Pascual ha desatado muchos comentarios y muchas protestas. Además, su nuevo cargo es el mismo que en los últimos años han desempeñado Tomás Alvarado y Antonio Rocamora, dos personas que no han salido bien paradas de su paso por el Elche.
El nuevo consejero delegado aseguró que entendía que, a partir de ahora, iba a ser vigilado con lupa por todo lo que había ocurrido con sus antecesores. «Entiendo que pueda ser así, pero tampoco considero que será malo», aunque quiso aclarar y pedir que «no es bueno que generemos polémicas donde no las hay».
A pesar de que con su nuevo cargo Pascual va a dejar de ser consejero, el presidente afirmó que no tienen previsto nombrar un nuevo consejero como sustituto.
Juan Pascual estuvo acompañado antes, durante y después de su comparecencia de prensa, por los consejeros César Nohales y Ramón Segarra, que fueron, especialmente el primero, uno de sus valedores para que entrara en el Elche.
