Saúl Ñíguez, hijo del exjugador franjiverde Boria, y hermano de Aarón, que vistió las últimas campañas la camiseta franjiverde, se ha ganado un puesto en el Atlético e incluso podría estar en la Eurocopa. Vicente del Bosque ya lo llamó para los entrenamientos previos a los partidos que la Selección jugó contra Costa Rica y Bielorrusia ante las ausencias de varios de los jugadores internacionales.

¿Sueña con estar con la absoluta en Francia?

No. Hay que ir paso a paso. Estoy muy contento en el Atlético de Madrid, estoy creciendo como futbolista, juego con asiduidad y lo demás ya vendrá. No conviene precipitarse. Ahora, estoy centrado en ayudar a la Sub'21 para el Europeo que se celebrará en el verano de 2017 en Polonia.

La Prensa británica anunció hace unas fechas que el Manchester United estaba dispuesto a pagar 20 millones por su traspaso...

El Atlético es mi equipo y no pienso en otra cosa. ¿Simeone? Es un entrenador muy completo y ojalá esté con nosotros muchos años más. Es muy exigente, trabaja duro y, sobre todo, es un ganador. A nivel personal le debo todo. Me ha hecho debutar en todas las competiciones y las cosas siempre me las ha dicho a la cara, con la verdad por delante. Cuando vio que no iba a jugar me lo dijo y me fui cedido al Rayo Vallecano, donde también tuve la suerte de contar con otro gran técnico como Jémez.

Steven Gerrard ha sido su ídolo, pero, ¿a quién le daría el balón de oro?

Gerrard es mi referencia y tuve la suerte de que Manquillo me trajera una camiseta del Liverpool. ¿El balón de oro? Sin dudarlo a Antoine Griezmann, por delante de Messi y Cristiano. Aparte de la calidad futbolística que tiene y que todos vemos, lo que más admiro de él es el trabajo que hace en el campo en beneficio del grupo.

Bajando a la tierra, ¿cómo está viendo al Elche?

Muy bien. Después del verano que tuvimos estar ahora a tres puntos de la zona de promoción de ascenso y a once del descenso es para estar contentos. Debemos darle las gracias Baraja por venir aquí en un momento tan complicado y aguantar tanto. Se merece un monumento.

¿Ha llegado a comprender los motivos del descenso del Elche?

No tiene explicación. El verano fue muy duro. Ver como después de ganarte la permanencia en el campo te bajaban de esa manera, cuesta asimilarlo. Nos había costado mucho llegar a Primera y quitarte el premio de esa forma jamás lo olvidaré. El Elche es el equipo de mi vida y el de mi familia. Además, Aarón lo pasó realmente mal y verlo sufrir de esa manera todavía lo hizo todo más complicado. Fue una injusticia. Fue un palo muy duro para todos nosotros. Si alguien hizo algo mal, que lo pague. Ni la afición ni el club, ni tampoco los jugadores y los empleados, se lo merecían. Ahora, nos toca apoyar a todos y ayudar a un equipo que estoy seguro que volverá a estar arriba.