El técnico franjiverde Rubén Baraja lleva 15 días en el Elche CF y después de comprobar todo lo que está sucediendo en el entorno en las últimas semanas no duda en afirmar que «la afición debe rebelarse contra esta situación para no dejar morir al club», a falta de cinco días para que se cumpla el plazo dado para abonar a los futbolistas lo que se les adeuda y, de esta manera no caer en Segunda División B.
Ante esa dura realidad, el preparador vallisoletano trata de ser positivo, no sin antes insistir en el papel de los seguidores ilicitanos, que han sido un ejemplo de compromiso hacia sus colores en las últimas campañas. «Estoy un poco sorprendido por lo que está pasando. Aunque llevo aquí sólo 15 días y no me puedo erigir como conocedor de la situación del Elche de los últimos años, pienso que la gente debe rebelarse contra esta situación. Las personas que sienten a este club deben estar con nosotros, luchar para solucionar esta gravosa situación», apunta, antes de afirmar de forma categórica que «yo creo que es el momento de reaccionar, de lo contrario vamos a dejarlo morir y eso no podemos consentirlo. Necesitamos soluciones de inmediato si no queremos que ocurra lo peor».
A juicio de Rubén Baraja «hay que ser honrado y honesto y decir la verdad a la gente. El Elche cuenta con una masa social brutal y con mucha historia y si no vamos todos en la misma dirección esto puede acabar muy mal. El tiempo se acaba y el club debe mantenerse en Segunda División».
Apuntar que Baraja firmó el viernes un manifiesto, con el resto de trabajadores adscritos a la primera plantilla del Elche, pidiendo soluciones a la actual situación que vive el club ilicitano. Se solidarizó con un grupo de personas que llevan meses sin cobrar.
Planificación deportiva
El consejo que comanda Juan Anguix, a punto de ser sustituido , tenía planificado comenzar a configurar la plantilla a mediados de julio, pero el descenso administrativo y la nueva amenaza de bajar a Segunda B por impagos a los futbolistas, unida a la imposibilidad de asegurar a los posibles fichajes en qué categoría jugará el equipo, ha paralizado el proceso. Baraja entiende que «estamos en un punto ya límite y necesitamos soluciones urgentes».
Explica el exjugador del Valencia que «llegué a un equipo como el Elche con unas buena expectativas deportivas, que podía ser equipo de Primera o Segunda División. Hablas de una cosas y unos objetivos que con el paso del tiempo se van incumpliendo. Te metes en una situación de enredo. Necesitamos soluciones urgentes, ya que hay gente que debe salir y otra venir. Configurar el equipo que va a competir porque apremia en estos momentos».
Paralelamente a toda esa premura deportiva, Baraja reconoce que «hay una situación social y económica, que es fundamental y la más importante. El tema de la viabilidad del club está por encima de nosotros y de cualquier persona o futbolista. A día de hoy, lo más principal es que esa estabilidad se produzca».
«Hay una serie de límites que se deben cumplir. Necesitamos soluciones urgentes y avanzar. Si este tipo de cosas no se dan estamos llamados a un fracaso casi absoluto. Siempre hay tiempo, si somos conscientes de la realidad que tenemos», reflexiona.
Reconoce que tiene contacto directo con Juan Anguix, presidente del club ilicitano, y reconoce que «ya le he dejado claro de cosas que han incumplido. Soy una persona seria que ha venido aquí a trabajar, independientemente de la categoría, con ambición, pero hay cosas que hay que avanzar ya. Tenemos pocos días.
Salida de jugadores
Una gran parte de la plantilla franjiverde ya ha comunicado al club su deseo de querer desvincularse del equipo y la cifra aumentará aún más en el caso de un nuevo descenso administrativo. Baraja comenzó trabajando con 12 jugadores que habían militado en Primera, pero en los últimos amistosos ya ha prescindido de algunos de ellos, con ofertas de otros clubes. Además, el centrocampista Pedro Mosquera ya se ha despedido de la entidad con destino al Deportivo y dos futbolistas importantes con contrato, como Jonathas y Rodrigues aún no se han incorporado al grupo tras las vacaciones y en el club se duda de que lo hagan. «Aquí hay jugadores que no saben cuál va ser su futuro y hay que solucionarlo. Si tienen buenas ofertas y el club ha decidido traspasarlos no puedo hacer nada. Estaba preparado para dicha circunstancia. Pero tienen que venir otros para sustituir a los que se van». Insiste Baraja en que «hay que fijar los jugadores para los objetivos que tengamos. El punto de partida es importante». El preparador franjiverde reconoce que «no me he planteado lo de entrenar al Elche en Segunda B y lo importante es que se solucione todo esta semana».
Finalmente, el entrenador castellano apunta que «no me siento engañado por nadie, pero sí se han incumplido unas garantías que son mínimas para preparar una temporada. Estamos en un punto muerto, en un sinsentido que hay que solucionar lo antes posible para evitar males mayores».
