Porque apenas supera los 27.000 habitantes, porque Ipurúa tiene una capacidad actual para 5.900 personas, porque los directivos han mirado la economía como si fuera la de su casa, porque toda la plantilla se va junta de vacaciones en verano... Por todo ello y más, el Eibar es un club distinto, especial. Tanto que todos los equipos deben algo (millonadas) a Hacienda menos la entidad armera. Se dice pronto.

Tiene su miga que acabara primero en la Liga Adelante contando con el presupuesto más bajo de la categoría. A eso se le debe sumar que su mejor jugador, Jota Peleteiro, venía de pegársela en el Castilla. En fin, muchos detalles para que se trate de un milagro. Mejor hablar de trabajo y del bueno.

Porque su entrenador, otra cosa no, pero currante es un rato. Solo hay que escucharle hablar. La que se lió hace unas semanas con la charla motivadora que le ofreció a sus jugadores para levantarles la moral de cara a medirse contra el Atleti. Simeone entendió bien el mensaje y no se molestó. Seguramente sí con el recital que dieron los eibarreses en el Calderón (2-1). Chicharro incluído de Abraham. Si no llega a ser por la estrategia, los rojiblancos hubieran pinchado ese día.

Sin embargo, en casa contra el Dépor el Eibar se vio impotente para superar la muralla visitante. Por ese motivo, el técnico ha declarado en la previa que existen «ganas de que empiece el partido» de hoy. El 0-1 de hace unos días escoció. Los gallegos solo tiraron una vez entre los tres palos. La última visita azulgrana al Martínez Valero también dejó a la afición local helada. Fue en la primera jornada de Segunda del ejercicio 08/09. El cero a cero campeaba en el marcador hasta que en el 93´ apareció Toquero, actual delantero del Athletic, para fusilar con la zurda a Willy Caballero.